Escrito por Guisella Lachira
Cuando descansaba en su dormitorio cumpliendo el aislamiento social obligatorio por el brote del coronavirus, uno de los presuntos asesinos del suboficial Gianni Álamo Labrín (25), asesinado de un balazo en la cabeza el pasado 3 de marzo en el caserío La Pala, en la carretera Malingas-Tambogrande, fue intervenido por detectives de la Divincri, Inteligencia y comisaría de El Indio, en el distrito de Castilla.
Ayer, a las 11:50 de la mañana, la Policía intervino en el interior de la vivienda, situada en la manzana G4, lote 3 en el asentamiento humano El Indio, a Jazmeer Nemesio Paredes Alcántara, alias “Cirilo”, quien es acusado de haber asesinado a Álamo Labrín y dejar herido al agente Luis Caramantín Cabanillas (32). En su contra pesa una medida limitativa de derecho.
Durante su traslado a la sede de la Divincri, “Cirilo” dijo ser inocente y no haber participado en el crimen del suboficial. “No tengo nada que ver aquí, soy inocente”, dijo sin el menor remordimiento.
Durante el operativo fueron detenidas cuatro personas más, entre ellos, un menor de 17 años. En el domicilio, la Policía encontró una escopeta hechiza, 186 ketes de PBC, 4 bolsas con tallos y hojas de marihuana; además de tres motocicletas y accesorios de vehículos al parecer desmantelados.
Como se sabe, el pasado 8 de marzo, la Policía intervino en el distrito Veintiséis de Octubre a Juan Carlos Castañeda Pacherres (23), alias “Juancito”, quien actualmente se encuentra internado en el penal de Piura cumpliendo 9 meses de prisión preventiva acusado de presunto coautor del crimen del suboficial. Durante las diligencias, los detectives de homicidios identificaron a sus cómplices alias “Conejo”, “Zancudo”, “Colorado” y “Cirilo”, quienes estuvieron a bordo del automóvil que fue intervenido por el agente fallecido el día del crimen.