A propósito del Día del Periodista, que se celebró el 1 de octubre, el exjefe de Informaciones de Diario Correo Piura, Hugo Gonzales Zapata, resalta el valor de la actividad periodística y cuenta sus innumerables anécdotas desde que empezó su carrera profesional.
¿Cómo se produjo su ingreso?
Me había comprometido con mi esposa Margot Orozco y no tenía trabajo. Vino un tío, uno de los fundadores de diario Correo, a quien le dije que quería ir a trabajar a Lima. Él le habló, en esa época al jefe de Redacción, Juan Zúñiga Sañudo, y me dijo que fuera.
Antes eran máquinas de escribir. Don Juan Zúñiga me dijo: “corrígeme ese material”. Era un material con varios errores ortográficos y para suerte mía, en el colegio era uno de los primeros en ortografía. Le gustó y me puso a las órdenes del jefe de Talleres, que tenía a cargo la corrección.
¿Cómo llegó a Redacción?
De allí se produjo una vacante en Diagramación, que antes era en papel. Entonces le dije a don Juan Zúñiga. Me preguntó: “¿sabes diagramar? No. Y él mismo me enseñó, y pasé a Diagramación. Pasó el tiempo, se produjo otra vacante entre los redactores. Y me gustó, porque veía como entraban, redactaban sus notas y salían. Y en ese ambiente quise entrar.
¿Le apoyaba Juan Zúñiga?
Entonces, era el director. En mi época no habían universidades con facultades de Periodismo. Todos eran prácticos y el periódico era para mí una universidad, los directores para mí fueron mis catedráticos. Él me aconsejaba: “lee siempre”, decía. Si ves un papel tirado en la calle, no lo patees, levántalo y lee. Y así nació en mí el hobby de leer bastante, hasta ahora. Y me convertí en un ratón de biblioteca.
¿Cuáles fueron sus inicios en Redacción?
Mi primera columna fue de espectáculos, en esa época los cines te daban material para hacer una síntesis de las películas que pasaban. Así comenzó.
¿Y el “sargento Chiricuto”?
Mi fuerte fue policiales. Un teniente me bautizó como el “sargento Chiricuto”. De allí nació mi columna con ese nombre. Anécdotas tengo bastantes.
¿Cuéntenos alguna anécdota?
Como redactor, yo entraba a la 1:00 de la tarde y recibía los cables. Un domingo estaba sentado en la puerta del jirón Ica y viene una señora bien elegante, bonita. Me dijo: “¿señor, usted trabaja aquí? Sí, le dije. Quiero poner una denuncia. Adelante. Estaba solo el local. Y me empezó a decir que Inteligencia del Ejército la seguía, que la querían matar. Yo tomaba nota, ella persistía, se dio vuelta por donde estaba sentado y me tomó del cuello. Me dijo así me quieren coger, así. Y estaba que me ahorcaba. Para suerte mía, entraba un trabajador de Talleres Errol Nolte. ”Suéltalo“, le dijo y la botó. ”Hugo no sabes, esa es loca... vive por el barrio Norte“, me contó.
¿Qué representa para usted el periodismo?
Es la base de la democracia. Hay que escribir la noticia con veracidad, siempre diciendo la verdad.
¿Cuál es el panorama del periodismo actualmente?
Ahorita es una de las profesiones más importantes, pero es maltratada, con el tema de la corrupción que está salpicando a todo el país. En algunos casos, ha estado ahogando la democracia, no se ha informado en forma veraz, sino tomando partido. Pero, siempre prevalece la verdad. Ojalá, esto se componga, porque la crisis es grave. Y el periodismo es orientar, enseñar y educar.
¿Qué recuerdos del recién fallecido exdirector Teddy Montúfar?
Fue un director con una gran personalidad, muy humilde y sencillo, nunca se exasperaba, enseñaba y conversaba.