Ante la propuesta del candidato presidencial de Perú Libre, Pedro Castillo Terrones, como uno de sus ejes en su plan de gobierno el inicio del proceso de una “segunda reforma agraria”; especialistas consultados por este diario afirman que no es recomendable. Además, el aspirante no explica cómo lo hará.
Propuesta
El magíster y docente de la Universidad de Piura (UDEP), Manuel López Ortiz, afirmó que el tema es muy sensible porque se tiene una experiencia dramática de lo que es una reforma agraria, pero lo preocupante de la propuesta es que no se explica en qué consistiría.
“Tampoco es la segunda reforma agraria en el Perú. Lo que más recordamos es lo implementado por Velasco que significó expropiaciones de tierras productivas y una entrega directa a los trabajadores, y esto trajo al menos 20 años de atraso en la agricultura, por eso es traumático. Se entregó tierra a los trabajadores que no tenían capacidad de gestión, no hubo soporte en la investigación, innovación y por eso hubo esos 20 años de retraso”, explicó López.
Agregó que una reforma agraria podría ser muy bien llevada, pero buscando una reestructuración de regímenes de la tenencia de la tierra y una mayor eficiencia en los sistemas productivos. “Si se hace respetando la propiedad privada con un enfoque de desarrollo de la agricultura familiar, de negocios inclusivos, sostenibles, podríamos tener una propuesta de reforma agraria adecuada, pero el temor que se tiene es que justamente partiendo de una propuesta económica socialista del Sr. Castillo es similar a la visión política de Velasco se tiene ese gran temor que está basada en expropiaciones de tierras productivas y no lleva a una gestión adecuada del país”, dijo López.
El especialista de la UDEP subrayó que el agro hoy en día es la segunda actividad exportadora del país e intervenirla “podría ser muy peligroso si no se hace de manera inteligente, pensada y consensuada”.
“Intervenir un sistema que ha estado funcionando bien, que ha generado exportaciones, trabajo, divisas para el país y desarrollo rural, puede ser peligroso”, recalcó.
El también director de Innovación de la UDEP reiteró que el problema en la propuesta de Castillo es que no explica en qué consistirá la reforma, lo cual causa incertidumbre y temor en la economía.
Indicó que, de aplicarse como la de Velasco, perjudicaría a las empresas agroexportadoras que tienen campos productivos y eficientes.
López recalcó que hay otras formas de realizar una reforma agraria bien hecha. “Tenemos varios proyectos de irrigación en desarrollo que podría abrir nuevas áreas de riego, de cultivo en zonas eriazas. Una reforma que proponga entrega de medianas y pequeñas áreas a medianos y pequeños productores podría ser una forma de darle acceso al terreno, no expropiando sino ampliando el terreno agrícola, es algo parecido a lo realizado en la irrigación de San Lorenzo”, explicó López.
Añadió que prohibir importaciones perjudicará al agro. “Hay productos que se usan para producir y son importados”, explicó.
López resaltó que el Perú no es autosuficiente para prescindir de las importaciones en productos alimenticios. “Tenemos que importar algunos productos para cubrir la canasta básica de la mayoría de la población. Podemos decir que vamos usar los campsos de uvas, arándanos y otros para producir alimento peruano, pero esto no es suficiente, además es más rentable producir esto y generar divisas para poder importar que hacer esa producción, sería poco inteligente para hacer se cambio”, precisó.
Para el doctor y catedrático de UDEP, Javier Gallo Olmos, en la primera reforma agraria se expropió haciendas hiperproductivas a nivel mundial y se entregaron a los trabajadores, pero destruyeron los sistemas.
“Una empresa necesita capacidad gerencial, no es solo quién es el dueño, sino quien la maneja, se necesita capital de trabajo, tecnología...qué quiere decir una segunda reforma agraria, ...ahora el agro es de altísima tecnología, inversión por hectárea”, explicó Gallo.
Agregó que se desconoce en qué consiste la segunda reforma agraria. “Pero si es quitar la empresa a los grandes exportadores sería la peor desgracia y no alcanzaría para mucha gente porque son pocas hectáreas”, afirmó.
El experto en agronegocios indicó que Castillo tiene propuestas populistas para ganar voto. “No tiene sentido económico”, acotó.
Gallo subrayó que es necesario apoyar a los pequeños productores. “Urge un apoyo al pequeño productor. Habría que ayudar a los productores, a agruparse, coordinar con empresas. La agricultura moderna no es para pobres, requiere insumos, tecnología, capital de trabajo, inversión. En el Perú el 80% no abona porque son pobres”, dijo.