Moradores de distintos sectores de la provincia de Sullana, pidieron el cierre de bares y cantinas ilegales que atentan contra la tranquilidad de las familias y donde, además, proliferan diversos hombres y mujeres extranjeros que generan pleitos.

Uno de los lugares afectados es el centro poblado de Mallaritos del distrito de Marcavelica, donde los vecinos están cansados de la bulla hasta altas horas de la madrugada y donde las vecinas señalan que no pueden reclamarles porque, más bien, terminan siendo agredidas por las extranjeras que trabajan en estos locales.

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Otro lugar donde están situados estos bares, es el centro poblado de Jíbito del distrito de Miguel Checa donde llegan grupos de sujetos que terminan peleándose en las calles. También ocurre lo mismo en locales del asentamiento El Obrero en el sector denominado La Selva en Sullana.