Planta procesadora de fibra 'duerme' en Salcedo

La industrialización en el altiplano peruano es un anhelo permanente de la población. El electo gobernador regional, Walter Aduviri Calisaya, ha vuelto a poner en agenda este tema, razón por la que es necesario revisar la viabilidad de la industria en Puno.

Un sector muy representativo de la producción es el alpaquero, los criadores han reclamado con ahínco la instalación de plantas de procesamiento de fibra, pero sus pedidos no tienen eco. La gestión del exgobernador Mauricio Rodríguez logró el financiamiento para el conocido como “Proyecto Proalpaca”, sin embargo, los fondos son soltados a cuentagotas, sin aparente impacto en la economía regional.

La industrialización propiamente dicha de este sector no es una novedad, en el año 1990, el entonces CTAR Puno adquirió una planta procesadora que ahora duerme el sueño de los justos en el centro poblado de Salcedo; aparentemente porque ninguna autoridad se ha interesado. El exdirector del Proyecto Especial de Camélidos Sudamericanos (PECSA), Alex Montufar Condorena, informó que dicha planta fue puesta a funcionar aproximadamente en el año 1995: “llegó un ingeniero italiano y lo puso a funcionar”.

Asimismo, en el año 2015 el mismo Montufar hizo funcionar las peinadoras, pero hacerlo de manera permanente e integral requiere una inversión aproximada de seis millones de soles.

Según el especialista, poner a funcionar esta planta sería de gran beneficio para los alpaqueros. La planta contiene lavadoras (tren de lavado), tinas, cardadoras, peinadoras, vaciatechos, entre otros implementos.

La planta tiene la capacidad de procesar hasta tops, es decir madejas gruesas de fibra listas para convertirlas en hilos. De todos modos, sería de gran ayuda para incrementar los ingresos de los productores, porque un kilo de fibra cuesta actualmente 40 soles, convertido en top llegaría a costar unos 170 soles. “Además, el precio del top varia de acuerdo a la calidad de fibra y la de Puno ha mejorado mucho”, dijo Montufar.

La idea de relanzar la planta procesadora de fibra que se guarda en los almacenes de Salcedo, implica una inversión que tendría que asumir la gestión del electo gobernador Walter Aduviri Calisaya. También la adecuación de la planta en un local que está a cargo de la DRAP en el distrito de Cabanillas.