Esta es una de las peores crisis que afronta el sector agropecuario por la falta lluvias. La campaña agrícola que inicia en el mes de agosto se ha visto seriamente afectada, debido a que no se han podido sembrar los cultivos de panllevar por falta de este recuso vital. Frente a un escenario de cambio climático que está provocando el déficit hídrico, el panorama se torna desolador.
LEA TAMBIÉN: Puno: Conveagro pide que el Midagri garantice más de 100 millones para el agro
Germán Cutipa Flores, director de estadística de la Dirección Regional Agraria (DRA) de Puno, explica que al 21 de noviembre de la campaña agrícola 2022-2023, en la región se dejaron de sembrar 46 744 hectáreas de cultivo. Para algunos productos que debieron sembrarse en octubre, representa una pérdida total.
Las más afectados son los granos y productos de larga duración como la quinua, cañihua, cebada de grano, oca, habas y la mashua, cuyas posibilidades de siembra de perdieron el 99%, mientras que del primer producto, a pesar del ser abanderado de la región Puno, las pérdidas serán del 100%.
La quinua es el producto más perjudicado. Debería haberse sembrado en octubre, pero por la falta de lluvia no se pudo. La siembra normal es de 36 060 hectáreas, pero a la fecha se dejaron de sembrar 14 176. Se estima que solo llegaría 22 127 cultivadas, en el mejor de los casos.
Generalizado
Flores Cutipa señala que esta es un problema generalizado que se está presentando principal y drásticamente en 11 en las 13 provincias altiplánicas de la región, mientras que en Sandia y Carabaya, por contar con zonas de selva y ceja de selva, se registran leves lloviznas, pero son insuficientes para productos como el maíz, que ya presentan afectaciones.
El monitoreo realizado comprende al mes de octubre, y puesto que todavía falta evaluar noviembre, las cifras desalentadoras serían superiores.
La esperanza de los productores, es que en diciembre se presenten las precipitaciones pluviales y así poder salvar los sembríos de algunos productos, como la papa. De no ser así, se tendrá mayores repercusiones en las cosechas que será mínimas, o en el peor de los casos, nulas.
La escasez de lluvias no solo está dejando estragos para los agricultores, sino también para la ganadería que ya no cuenta con agua y pastizales para el ganado. FloreS comenta que los alpacas y vacunos sufre principalmente, porque se no hay pastos naturales y se han secado los manantiales y bofedales.
Soluciones
La siembra y cosecha se agua son alternativas para paliar con este tipo de emergencias. Desde la gerencia de recursos naturales del Gobierno Regional de Puno había propuestas para trabajar en este tipo de infraestructura hídrica, sin embargo, ha quedado en nada por falta de voluntad política.
LEA TAMBIÉN: Puno: el Minagri encamina declaratoria de emergencia del agro
Paliativos
El Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego encamina una declaratoria de emergencia por el déficit hídrico, pero los productos no sembrados no se podrán recuperar en la mayoría de los casos. La esperanza de los productores es que en diciembre llueva para poder salvar algunos cultivos como la papa.
El seguro agrario catastrófico podría mitigar las pérdidas para los productores, pero este solo beneficiará a quienes hayan realizado las siembras en este periodo agrícola.