Una denuncia por presunta negligencia médica en el hospital Unanue interpuso el ciudadano Edgar Pacori Chipana luego que su bebé naciera muerta la mañana del miércoles, pese a que todos los pronósticos que le habían dado, incluso ese mismo día, eran que su salud era óptima.
Contó que esperaba con ansía el nacimiento de quien sería su primera hija. En uno de los últimos controles efectuados en el centro de salud Alto de la Alianza, el 17 de setiembre, a su esposa le indicaron que solo debía esperar los dolores del parto para trasladarse al centro médico.
REFERENCIA
El lunes en la noche luego de intensos dolores su cónyuge Luz Callata Arocutipa fue derivada al hospital Hipólito Unanue, donde a pesar de mostrar su malestar no fue atendida de inmediato por el personal de turno.
“Me decían que no era una emergencia, que tenía que haber sangre, me tuvieron esperando a pesar que les dije que mi esposa ya estaba con 41 semanas y tres días de gestación, recién después de mucho rato la atendieron a mi esposa y la internaron”, comentó Edgar Pacori.
La revisaron y dijeron que todo estaba bien y le programaron la cesárea para el miércoles en la mañana. “Solo después de la operación el médico me comunicó que mi bebé nació muerta, ahora yo solo exijo justicia, para saber que pasó si decían que todo estaba bien”; reclamó.
La fiscal Sonia Hinojosa Ramos asumió el caso y dispuso la autopsia, que arrojó que la bebé murió de edema pulmonar. Se enviaron muestras a Lima que determinarán a qué se debió dicha acumulación de líquido en los pulmones, si fue por una afección de la bebé o un agente externo.