El alcalde provincial de Tacna Crnel PNP (r) Pascual Güisa Bravo nuevamente ayer se comportó de manera malcriada y grosera contra los hombres de prensa que lo abordaron en la ceremonia de inauguración de la obra de remodelación de la plaza Tacora, en la Junta Vecinal Augusto B. Leguía, que se ejecutó con una inversión de S/ 1.2 millones.
La autoridad edil fue preguntado sobre la ola de inseguridad que vive la ciudad, sin embargo prefirió hablar de la obra recién inaugurada que asegura mejorará las condiciones de vida de la población y que se ubica muy cerca al futuro mercado mayorista.
Enseguida otro hombre de prensa le insistió con el tema de la inseguridad ciudadana, recordando los recientes crímenes y asaltos a mano armada, pero la autoridad edil en vez de responder la pregunta le comenzó a interrogarlo: “¿Cuál es tu nombre?, ¿tú eres Richard? ¿tú eres de radio Uno? ¿Qué titular quieres para mañana?”... le siguió inquiriendo de manera grosera y malcriada.
Ante la insistencia con la interrogante, y luego de identificarse el hombre de prensa, la autoridad edil señaló que tenía un tema pendiente con el medio de comunicación en el que trabaja. Citó varios temas o denuncias que supuestamente se dijeron en ese medio de comunicación y que al parecer le disgustaron.
En la breve declaración, el alcalde Pascual Güisa solo hizo referencia a algunos temas pero de manera superficial, comprometiéndose a responder ampliamente todas las preguntas al término de la ceremonia, sin embargo nada de eso pasó. Apenas culminó el brindis, e incluso antes, personal de Seguridad Ciudadana lo rodeó para evitar que se le acerquen los hombres de prensa. A este propósito se sumó su seguridad personal y algunos administrativos de la comuna provincial.
Fueron cuatro agentes de serenazgo, supervisados por el mismo subgerente de de Seguridad Ciudadana, Crnel EP (r) Reynaldo Romero Meléndez, los que lo protegieron a la autoridad edil para que no se le acerquen los periodistas y lo escoltaron a la camioneta que lo esperaba cerca. Los hombres de prensa le reclamaron por la obstrucción a su labor, pero nadie intervino. A voz en alta le hicieron preguntas al alcalde Pascual Güisa que optó ignorar y subir las lunas polarizadas del vehículo y marcharse.