El Consejo Universitario de la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann aprobó reprogramar el calendario académico 2023 ampliándolo hasta el 29 de febrero del 2024 a fin de que los docentes y estudiantes recuperen las clases perdidas en huelga efectuada del 26 de septiembre al 1 de diciembre del 2023.

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Inicialmente los representantes estudiantiles habían solicitado que las clases culminen indefectiblemente en enero del 2024, a fin de que no se vean perjudicados ya que de enero a marzo algunos desarrollan pasantías, prácticas e incluso trabajan para solventar sus estudios.

Se aprueba propuesta

La vicerrectora académica Adriana Luque Ticona hizo ver que podrían ser sancionados por la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria o la Contraloría General de la República si no se recuperan las clases en su totalidad y que además hay criterios de calidad educativa que deben tomarse en cuenta.

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Finalmente por decisión de la mayoría se aprobó la segunda propuesta que establece que el segundo semestre del año académico del 2023, iniciado el 21 de agosto y tendrá su primera evaluación del 18 al 22 de diciembre del 2023, la segunda evaluación del 12 al 16 de febrero del 2024 y entre el 18 al 29 de febrero se realizarán los exámenes, registros finales y la culminación del semestre.

Se validan avances

Además en el artículo 2 de la resolución se valida las clases presenciales y virtuales impartidas durante el período de huelga y se autoriza excepcionalmente el dictado de clases virtuales.

La consejera estudiantil Jackelinne Ponce señaló que tras la huelga los únicos perjudicados son los estudiantes porque tendrán que hacer clases hasta febrero perdiendo prácticas, pasantías y trabajos.