Un grupo de moradores de la provincia de Zarumilla, encabezados por el subprefecto Víctor Lamatta Vidarte, llegaron hasta la sede del Gobierno Regional de Tumbes (GRT) para ver el estado de dos obras importantes para dicho sector, el óvalo vial que se encuentra paralizado desde hace meses y el colegio Gran Chilimasa que debe ser intervenido por dicha entidad al estar dentro del plan de la Reconstrucción con Cambios.
PREOCUPACIÓN Los pobladores y autoridades de la provincia fronteriza llegaron hasta la sede del Gobierno Regional de Tumbes para buscar soluciones ante la paralización de la obra vial del Óvalo de Zarumilla, la cual se inició el año pasado, pero a la fecha no se ha concluido.
Y según alegan los moradores, se siguen propiciando accidentes en dicha zona, convirtiéndose así en un punto peligroso.
“Nos hemos reunido con el gerente de Infraestructura del gobierno regional, quienes nos indican que fin de este mes estarán haciendo la evaluación para ver si el segundo postor que quedó en la licitación del óvalo cumple con los requisitos y asuma la conclusión de la misma”, refiere el subprefecto de Zarumilla.
Sobre el particular, el consejero José Ortiz refiere que de acuerdo a la información dada por el área de obras, el Consorcio Dos Ases, que estuvo a cargo de dicha construcción, habría avanzado hasta un 60% del total, por lo que ahora estarán haciendo un corte presupuestal y físico para que con un promedio de 5 millones de soles se logre saldar esa obra.
“El Presidente Vizcarra ha recomendado a los gobiernos locales que se concluyan las obras paralizadas, y eso debe cumplir también la entidad en Tumbes”, refirió.
En el caso de la obra del colegio Gran Chilimasa, están a espera de la modificación al expediente.