La socialité Kim Kardashian se convirtió en madre de la pequeña North West el pasado mes de junio.

Lo que más ha llamado la atención de los medios es la silueta que ahora luce la primeriza madre. Unas recientes imágenes la muestran muy subida de peso con la melena rubia y corta tan distinta a su look de soltera.

Sin embargo, las críticas hacia la modelo vienen desde que anunció su embarazo y su desatinada manera de vestir estando con un avanzado estado de gestación.