Angie Palomino: “Era la clásica amiga que escuchaba y aconsejaba”
Angie Palomino: “Era la clásica amiga que escuchaba y aconsejaba”

A pesar de que tuvo una carrera profesional vinculada al periodismo político, hoy Angie Palomino toma las riendas de la conducción a través de un exitoso programa de radio que busca dar un consejo a aquellos que necesiten de apoyo emocional.

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en la radio? Ha sido gratificante. Durante dos años conduje un programa por la noche, era un espacio dedicado a mis “chicos corazón” -así bauticé a mis oyentes- donde compartían sus historias de amor y desamor. He podido escuchar casos tan estremecedores como personas a punto de quitarse la vida, mujeres que acababan de descubrir una infidelidad o emotivas pedidas de mano. Gracias a esta experiencia, hace cinco meses estrenamos una propuesta donde me divierto desarrollando mi rol de coach, de lunes a viernes. Las llamadas siguen siendo lo más importante, me encanta escuchar a mi gente, ellos son los protagonistas.

¿Siempre le agradó la idea de tratar con parejas? En realidad, durante mucho tiempo hice periodismo político, pero jamás pensé dedicarme al amor y disfrutarlo tanto. Era la clásica amiga que escuchaba y aconsejaba una y otra vez a sus amigas.

¿Cómo surge la idea de convertirse en coach? Durante mi primer año en la radio tomé conciencia de que mi propósito era acompañar a las personas a descubrir su primer gran amor, ese que encontraban mirándose en el espejo.

¿Los consejos y soluciones que brinda al público son basados en su experiencia o tiene otros referentes? Reconozco que si no hubiera vivido experiencias difíciles a nivel sentimental, no podría entender a los demás. Por otro lado, considero que es primordial estudiar y actualmente continúo con una preparación porque deseo ayudar a mis oyentes para mejorar su calidad de vida emocional. Además, me gusta consultar estudios y publicaciones.

¿Se siente un modelo para las damas que buscan dejar atrás sus miedos? Son mis oyentes son los que me motivan a sentirme una mujer capaz de acariciar mis sueños. Es una enorme responsabilidad que hayan personas que me vean como su modelo, por ellas intento ser consecuente. Considero que una mujer de verdad es aquella que se siente bonita y que se cree merecedora de todo lo bueno que la vida tiene para ofrecerle.

Tiene una manera muy alegre de hablar con las personas. ¿Cuál es su fórmula para mantener esa dinámica? Me he formado en talleres de claun y stand up comedy, descubriendo herramientas que me permiten utilizar el humor como un vehículo de comunicación. Estar alegre es una elección. Un pequeño truco para encontrarse con la felicidad es que si sonríes, aunque no lo estés, tu cerebro no descubrirá la diferencia y asumirá que algo bueno te sucedió.

¿Qué significa para usted el empoderamiento femenino? El famoso ‘empowerment’ surge como consecuencia del amor que debemos tenernos a nosotras mismas. Es un proceso por el cual reconocemos nuestro poder individual y nos creemos “superheroínas”, capaces de lograr cambios reales y sostenibles en el ámbito en el cual nos desarrollemos, empezando con la transformación de adentro hacia afuera.

¿Qué le diría a las mujeres que sufren maltrato por parte de sus parejas? Que busquen ayuda psicológica y rediseñen su vida. No merecen a un “cavernícola” enfermo del alma y cuyas acciones apaguen el brillo de sus ojos. Todavía están a tiempo, empiecen ese hermoso viaje de amor hacia sí mismas.

¿Ha pensado alguna vez dejar su trabajo como locutora y dedicarse enteramente a ser coach? Si bien me gusta la radio, parte de mi filosofía de vida es gozar con el presente. Hoy disfruto estar en este medio, además de realizar talleres, conferencias, entre otras cosas. El contacto con el público me nutre. Uno de mis proyectos es llevar a la TV un programa de amor, pareja y empoderamiento. Un sueño siempre comienza con una idea; si balbuceas ese ideal y se te acelera el corazón, estás en el camino correcto.