Un equipo de biólogos del zoológico de Sao Paulo consiguió inducir a una pareja de Guacamayos de Lear (Anodorhynchus leari) a reproducirse por primera vez en cautiverio en Brasil, país del que esta especie de aves gravemente amenazada de extinción es endémica, informó hoy la institución.
“Tras años de empeño y dedicación para conseguir la reproducción de esta especie rara, el 13 de abril de 2015 los técnicos tuvieron una gran sorpresa al registrar el primer nacimiento en cautiverio de la especie Guacamayo de Lear en una institución brasileña”, según un comunicado del zoológico de la mayor ciudad de Brasil.
De acuerdo con la nota, el huevo fue empollado en un equipo especial por cerca de 13 días, a una temperatura de entre 37,2 y 37,5 grados centígrados y una humedad de entre el 45 % y el 55 %, para el buen desarrollo del embrión.
“La cría está respondiendo actualmente muy bien a los cuidados especiales de los biólogos del sector de aves del zoológico, como alimentación balanceada, control diario de peso y de crecimiento, y mantenimiento en incubadora con temperatura cercana a 35 grados centígrados”, según el comunicado.
Los biólogos calculan que sólo podrán conocer el sexo del ejemplar en unos dos meses mediante examen médico y aún no hay previsión de cuándo podrá ser presentado públicamente.
La cría es mantenida alejada de sus padres para evitar que puedan agredirla.
El Guacamayo de Lear es una especie de ave con plumaje de color azul de la misma familia del Guacamayo de Spix, otra ave endémica de Brasil que se caracteriza por su color azul y que inspiró la película de dibujos animados “Río”.
Los doce ejemplares de Guacamayo de Lear con que cuenta el zoológico de Sao Paulo están aislados y en jaulas que no pueden ser visitadas por el público debido al riesgo de extinción de la especie.
De acuerdo con especialistas, tan sólo sobreviven en todo el mundo, principalmente en zoológicos, unos 1.300 ejemplares de este especie cuyo hábitat natural son las paredes rocosas en el interior árido del estado de Bahía (noreste de Brasil).
Por su parte, el Guacamayo de Spix es considerado extinto en la naturaleza desde 2000, aunque actualmente sobreviven en cautiverio unos 90 ejemplares, que son mantenidos por instituciones de diferentes países, en su mayoría fuera de Brasil.