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Si estás casado o simplemente en una relación de pareja, es probable que más de una vez te hayas sentado a reflexionar acerca del futuro que les espera juntos.

Diagnosticar el estado de tu vida en pareja no es sencillo, pero para intentar definirlo, dos investigadores en economía de la Universidad de Virginia en Estados Unidos, crearon dos simples preguntas que podrían revelar las posibilidades de éxito que una relación tiene a lo largo del tiempo.

Las preguntas son:

1) ¿Cuán feliz estás con tu matrimonio comparado con cuán feliz serías si no estuvieras casado?

2) ¿Cómo respondería tu pareja a la misma pregunta?

Leora Friedberg y Steven Stern realizaron ambas interrogantes a más de 4.000 matrimonios durante la década de los 80, pidiéndoles que respondieran en una escala de grados que iban desde “mucho mejor” a “mucho peor”. 6 años más tarde revisaron el estado de las parejas y se toparon con algunas sorpresas.

Previsiblemente, las parejas que respondieron que se sentían más felices casadas tuvieron la tendencia a permanecer juntas. Lo que sí fue inesperado, es que las personas que sobrevaloraron la felicidad de sus parejas con el matrimonio, acabaron por separarse en mayor grado que las que opinaron que su compañero o compañera estaría mejor sin ellos.

Los investigadores interpretaron estos datos como que las personas que sobrestimaron el compromiso de sus parejas, creyeron -incorrectamente- que tenían mayor poder de decisión ante las desavenencias cotidianas.

“Si creo que mi esposa está realmente feliz con nuestro matrimonio, puede que la empuje a hacer una mayor cantidad de tareas o a contribuir en mayor medida con el ingreso familiar. Pero si no estoy consciente de que ella sólo está ligeramente satisfecha con nuestra relación, puede que decida que estas exigencias son la gota que rebalsó el vaso y decida que la separación es la mejor opción para ella”, indicó el profesor Stern al diario británico The Telegraph.

Y atención, porque puede que tu también estés errando en percibir cómo tu pareja se siente respecto de la relación. De hecho, casi un 25% de los participantes mostraron “serias discrepancias” en la forma en que valoraban su matrimonio.

El estudio encontró que cerca del 7% de las parejas encuestadas se habían divorciado 6 años después. De los hombres que habían sobrestimado seriamente cuán afectadas estarían sus esposas por un divorcio, 13% terminaron separados; en tanto, 14.5% de las mujeres que cometieron el mismo error acabaron su vida conyugal.

La clave para una buena relación: no asumir sino preguntar

Mantener una vida en común sana es una labor compleja ya que depende de muchos factores, sin embargo uno de ellos es clave: la comunicación. En este sentido, la revista de psicología Psychology Today recomienda que en vez de asumir lo que tu pareja puede estar sintiendo o pensando, le preguntes.

“Reflexiona sobre qué puedes haber estado haciendo para contribuir al problema. Piensa en qué podrías modificar sobre tu comportamiento para mejorar la situación. No asumas lo que tu pareja podría estar sintiendo o pensando: pregúntale“, afirma la doctora en psicología, Susan Heitler.