Ezio Neyra: “Deberíamos tener más referentes en temas artísticos y culturales”

“La idea es visibilizar a aquellos artistas, creadores e intelectuales que dedican su vida al quehacer cultural, y también fortalecer a las instituciones que dedican su tiempo a favor de este tipo de iniciativas”, señala Ezio Neyra, director de la Dirección del Libro y la Lectura del Ministerio de Cultura, con motivo del Premio Nacional de Cultura 2016, cuyas inscripciones cerrarán el 9 de setiembre.

¿Qué tipo de iniciativas pueden postular al concurso?

Este año el premio está dedicado a las letras y humanidades, a las personas que escriben literatura, que están inmersas en la lingüística y la ética.

¿Cómo ha sido la acogida en las anteriores ediciones de este concurso? 

Esta es la quinta edición. Inició en 2012, sin categorías, y desde el 2013, hay tres. En general la recepción ha sido muy buena. Este año estamos esperando que haya mayor cantidad de postulaciones, y también que lleguen más peticiones de ciudades fuera de Lima; porque de otra manera se convierte en un premio centralizado y no queremos eso.

¿Qué comentarios han recibido?

Hemos recibido buenos comentarios. Ya pensando como escritor, y no como funcionario, a mí me parece que es un premio fabuloso porque no solamente reconoce la labor artística e intelectual de uno, también te brinda un beneficio económico, que son 45 mil soles en “Creatividad” y “Trayectoria” y 50 mil en “Buenas prácticas institucionales”, un monto de dinero bastante considerables que te permite capitalizar mejor tu idea y continuar con tu labor artística y cultural.

Además, no es un premio cualquiera...

Ahora mismo es el único premio de su tipo dado por el Estado. Es un reconocimiento importante. Es más, no es un premio nuevo, comenzó a darse en 1948 ininterrumpidamente hasta 1980; de ahí se retomó en 2012. En otros países, los estados suelen dar este tipo de ayuda a sus colaboradores más importantes porque de otra manera caemos en lo que sucede muchas veces: reconocer a los creadores cuando ya están muertos. Eso es algo injusto para muchos autores que han dejado un gran legado para el Perú y que no se les ha premiado cuando estuvieron vivos.

¿Qué requisitos debe cumplir un postulante?

Existen tres categorías: “Trayectoria” “Creatividad” y “Buenas prácticas institucionales”. La primera está dirigida a personas que tengan por lo menos 25 años de trayectoria. Por ejemplo, el año pasado se premió a Julio Cotler. En “Creatividad” se premia a personas que tengan un acercamiento creativo a la práctica cultural; el año pasado ese reconocimiento lo obtuvo Lucho Quequezana. Por otro lado, las organizaciones que concursen en la categoría “Buenas prácticas institucionales” deben cumplir al menos 10 años de función; el año pasado el premio fue para el Reniec.

¿En qué radica la importancia de este tipo de reconocimientos?

Creo que lo más importante es quizá que contribuye a la formación de referentes, a visibilizar a creadores, artistas e intelectuales que luego pueden servir como modelos a seguir para las personas que formamos parte de la sociedad.

Además de impulsar la labor de los gestores culturales, ¿cierto?

Claro, los incentivas por un lado; y por otro, al convertir a estas personas en referentes, también ayudas a promover un mayor quehacer cultural y artístico. La idea, vista desde los ojos de un adolescente, es que uno conozca la historia y diga: “¡Ah, mira! Esta persona, que ha dedicado toda su vida a las artes o al quehacer cultural, tiene un gran reconocimiento como el Premio Nacional de Cultura. Entonces, ¿por qué yo no dedico mi vida al quehacer cultural?”.

¿Por qué invitarías a las personas a participar en este concurso?

Porque permite crear referentes. Yo creo que como sociedad deberíamos tener más referentes y modelos a seguir en temas artísticos y culturales. Yo invitaría a la gente a presentar postulaciones de personas que ellos consideran que son merecedoras de este premio, con dos lógicas: primero, crear referentes; y segundo, dar la posibilidad a creadores importantes y de trayectoria a ser merecedores de un reconocimiento en vida que los posicione en un lugar donde deberían estar.

¿Por qué tanta insistencia en la necesidad de crear referentes?

Por que nos hacen mucha falta. Como sociedad tenemos referentes en ámbitos como la televisión y otros rubros, pero no tenemos tantos en temas culturales y artísticos. Tener modelos a seguir promueve la actividad cultural y, a su vez, genera mejores ciudadanos.