Gonzalo Belmar: “Sacar el mapa del Perú de un tronco es complicado”

La vida se ha hecho para reunir todos los gustos y ser feliz, ese fue el destino de Gonzalo Belmar, un joven que combinó su pasión por la música y el ebanismo para formar con sus propias manos y de manera artesanal, la primera guitarra eléctrica con la forma del mapa del Perú que cumple con los estándares de calidad. Una innovación que lo llevó a emprender Guitarra Perú.

¿Cuándo nació tu atracción por la música?

Toda la vida. Cuando tenía 5 años me pusieron en clases de violín, aunque no me gustaba mucho por ser un instrumento clásico. De niño uno no escucha ese tipo de música sino lo que está en la radio, entonces sentía que no podía usar el violín para interpretar la música que me gustaba. El violín fue mi primer instrumento y luego de dos años pasé a tocar el bajo eléctrico y el piano.

¿A qué viene esa corriente de música tan fuerte?

A mis padres, mi mamá es pianista y arquitecta; y mi papá ingeniero y bajista. Es más, ellos se conocieron en el Conservatorio. Siempre he visto a mis padres muy relacionados con la música.

Y la atracción por la construcción de guitarras, ¿de dónde nació?

Eso fue después, me gustaba tallar en madera, pero era como un pasatiempo, y un día se me ocurrió fabricar este instrumento, ya que la guitarra estaba hecha de madera y tenía conocimientos de electricidad. El primero fue una cosa bastante artesanal, y poco a poco fui mejorando, conocí a personas en el camino que me ayudaron bastante con las distintas técnicas para tallar y pintar. Eduardo Caballanos, un amigo mío pintor de autos que hace trabajos muy finos, colaboró conmigo. Lo conocí luego de un pequeño accidente vial, tuve que recurrir a él para que pinte mi carro, hicimos una amistad y fue quien me enseñó todo sobre la pintura. Ahora pinto con uretano, que es una mezcla para autos.

¿Haz hecho otros tipos de guitarras para otras personas?

En realidad, recién ahora estamos comenzando a hacer la producción en serie, luego de mucho esfuerzo y trabajo. Uno de los inconvenientes más fuertes fue que la máquina que compré en el exterior llegó con defectos. El proveedor me vendió humo y al final no hice nada y busqué otras soluciones en vez de denunciar.

Y antes de la llegada de este procesador, ¿cómo preparabas el instrumento? 

El diseño se hizo de manera artesanal. Sacar el mapa del Perú de un tronco es complicado por la forma. Recuerdo que un amigo que tiene un taller me enseñó a usar una sierra de cinta, que es especial para estos cortes en ángulos, con ello pudimos resolver eso. Entonces corté el perímetro de la guitarra, fue todo un reto porque primero era necesario dibujar el contorno del mapa. Es un tema delicado porque la cuchilla es muy fuerte y es muy fácil tener un accidente grave. Luego de haber aprendido a usar esto, poco a poco logré hacer un corte más preciso. Después de ese paso se tiene que realizar la estética para dar la forma, porque parecía un ladrillo con la imagen del Perú. Ahí empecé a tallar los bordes para darle un peso más ligero y, de alguna manera, llegar a una simetría visual.

Cuando tallaste la madera, ¿pensaste en realizar Guitarra Perú? 

No, para nada. En realidad desde chico siempre fui muy curioso, ocultaba las herramientas del carpintero, malograba los muebles de mi casa, pero todo eso me ayudó.

Entonces, ¿cuándo nace tu empresa?

Luego de haber hecho la guitarra, me di cuenta de que la gente reaccionaba de buena manera y me contacté con PromPerú, ellos hicieron posible el lanzamiento de la guitarra y la gente respondió muy bien. Incluso hubo bastante difusión en los medios. Luego del lanzamiento, me contactaron para adquirir la guitarra y yo no tenía idea de que había alguien que la quería comprar y usar. Claro que para mí era complicadísimo ofrecerla, pues la he tenido que patentar para poder venderla. Después busqué el método de darle a la guitarra un precio asequible y que ellos tengan la guitarra de forma rápida, porque hacer el prototipo me tomó un año, y eso es demasiado tiempo.

DATO:

Gonzalo Belmar, emprendedor. Viene de una familia de músicos y desde pequeño le gustó el ebanismo, así que construyó la guitarra en forma de mapa del Perú para luego hacer su propio negocio.

2012 lanzó el instrumento como un objeto de orgullo ante los peruanos.

5 años tenía Gonzalo cuando empezó a estudiar música.