Los problemas en torno a la realización del Mundial Brasil 2014 continúan.

La policía lanzó gases lacrimógenos, balas de goma y bombas de estruendo para dispersar manifestantes antiCopa en Sao Paulo, donde se inaugura hoy el Mundial de fútbol.

Decenas de manifestantes se reunieron esta mañana cerca de una estación de metro de esta megalópolis, cargando la pancarta que rezaba "Si no tenemos derechos, no habrá Copa".

Los huelguistas dijeron que su objetivo era acercarse lo más posible al estadio Arena Corinthians, pero la policía los dispersó antes de que la marcha arrancara.

Cabe señalar que esta no es una protesta asilada. En los últimos días, cientos de personas han salido a las calles para mostrar su rechazo hacia esta fiesta deportiva, expresando que el gobierno podría gastar el dinero invertido en mejores causas.