Una mujer que usa máscaras faciales desinfecta sus manos cuando ingresan a una tienda de telas en Ludwigsburg, sur de Alemania, en medio de la nueva pandemia de coronavirus COVID-19. (THOMAS KIENZLE / AFP)
Una mujer que usa máscaras faciales desinfecta sus manos cuando ingresan a una tienda de telas en Ludwigsburg, sur de Alemania, en medio de la nueva pandemia de coronavirus COVID-19. (THOMAS KIENZLE / AFP)

Berlín [AFP].- Muchas tiendas y comercios de reabren sus puertas este lunes, en la primera fase de una operación de levantamiento gradual del confinamiento emprendida en un país que tiene la epidemia de “bajo control”.

Tiendas de alimentación, librerías o concesionarios de automóviles, entre otros, podrán levantar sus persianas este lunes, siempre y cuando su superficie no supere los 800 metros cuadrados.

Se trata de la primera etapa de un plan de desconfinamiento elaborado por el gobierno de junto con los dirigentes de los 16 Estados federados del país.

La canciller, cuya gestión de la crisis está siendo bien valorada por los alemanes, espera de este modo reactivar una economía que entró en recesión en marzo, una situación crítica que en principio durará varios meses.

“Frágil”

Con más de 135.000 casos oficialmente registrados y unos 4.000 decesos, la pandemia en Alemania está “bajo control” y es “manejable”, señaló el ministro de Salud, Jens Spahn.

Un hombre con una máscara protectora se encuentra en una tienda de té y vino en Ludwigsburg, sur de Alemania en medio de la nueva pandemia de coronavirus COVID-19. (THOMAS KIENZLE / AFP)
Un hombre con una máscara protectora se encuentra en una tienda de té y vino en Ludwigsburg, sur de Alemania en medio de la nueva pandemia de coronavirus COVID-19. (THOMAS KIENZLE / AFP)

El ratio de infección persona a persona, que mide el promedio de personas contagiadas por cada enfermo de , cayó al 0,7% el viernes, según el instituto Robert Koch, la autoridad federal que supervisa la evolución de la epidemia.

Esta “etapa ganada” es sin embargo “frágil”, advirtió la canciller, quien también estuvo confinada durante dos semanas en su domicilio berlinés tras haber estado en contacto con un médico que dio positivo por COVID-19.

“No podremos llevar nuestra antigua vida hasta dentro de mucho. La distancia y la protección continuarán rigiendo nuestra vida diaria”, advirtió Armin Laschet, dirigente de una de las regiones más afectadas por la pandemia, Renania del Norte-Westfalia, y candidato a la presidencia del partido conservador, la CDU.

Según el programa previsto, las escuelas y los centros de secundaria reabrirán a partir del 4 de mayo, empezando por los alumnos mayores. En Baviera, la región más castigada, los centros escolares abrirán una semana después.

Los ministerios regionales de Educación, que en Alemania tienen las principales competencias educativas, deben presentar antes del 29 de abril qué medidas prevén implantar para que los alumnos respeten un distanciamiento razonable, por ejemplo, reduciendo el tamaño de los grupos de aprendizaje.

Por otro lado, seguirá estando prohibido que más de dos personas se reúnan en la vía pública -salvo si se trata de una unidad familiar- y se tendrá que continuar respetando la distancia mínima de 1,5 metros entre persona y persona.

Las peluquerías podrán abrir a partir del 4 de mayo, pero los salones de masaje, de belleza y de tatuajes seguirán cerrados.

También permanecerán cerrados los centros culturales, los parques recreativos, las pistas y campos deportivos, y los bares y restaurantes, salvo si venden comidas para llevar.

Los grandes eventos como conciertos o competiciones deportivas estarán prohibidos, por lo menos, hasta el 31 de agosto.

Protección obligatoria en Sajonia

Alemania pretende acompañar el plan de desconfinamiento con un conjunto de medidas para atajar la epidemia, como un aumento de los tests para poder aislar a los enfermos. De momento, el país realizó 1,7 millones de exámenes de diagnóstico.

Y aunque no es obligatorio llevar mascarilla, la canciller Merkel lo “aconseja fuertemente”.

A partir de agosto, Alemania debería fabricar 50 millones de mascarillas a la semana, incluyendo 10 millones del tipo FFP2.

El uso de la mascarilla, que en la ciudad de Jena se decretó obligatorio a modo experimental, podría ser primordial para detener los contagios. El viernes, esta localidad de Turingia (centro) llevaba una semana sin registrar nuevos casos de contagio, según la prensa alemana.

En la región de Sajonia (este), el uso de mascarilla o de un pañuelo será obligatorio a partir de este lunes.