Pfizer es la primera farmacéutica en presentar una solicitud de este tipo en el país. De aprobarse, las vacunaciones en Japón podrían comenzar en marzo de 2021. (AFP / JUSTIN TALLIS).
Pfizer es la primera farmacéutica en presentar una solicitud de este tipo en el país. De aprobarse, las vacunaciones en Japón podrían comenzar en marzo de 2021. (AFP / JUSTIN TALLIS).

La farmacéutica estadounidense Pfizer solicitó este viernes al Ministerio de Salud de Japón la aprobación de su vacuna del para que pueda administrarse en el país, informó en un comunicado la división japonesa de la empresa.

Pfizer es la primera farmacéutica en presentar una solicitud de este tipo en el país. De aprobarse, las vacunaciones en Japón podrían comenzar en marzo de 2021.

La farmacéutica estadounidense ha entregado al ministerio material sobre los ensayos clínicos hechos hasta ahora y otras pruebas, y actualmente está desarrollando un estudio a nivel nacional para evaluar la seguridad, la tolerabilidad y la inmunogenicidad de la vacuna, en el marco del cual ya se ha administrado la segunda dosis.

Se espera que los datos principales se obtengan en febrero del próximo año y los resultados se finalizarán y enviarán tan pronto como estén completos”, explicó la farmacéutica en el texto.

Los peatones caminan por el centro comercial, empresarial y administrativo de Shinjuku, en Tokio, Japón, en medio de la pandemia de coronavirus. (EFE / EPA / FRANCK ROBICHON).
Los peatones caminan por el centro comercial, empresarial y administrativo de Shinjuku, en Tokio, Japón, en medio de la pandemia de coronavirus. (EFE / EPA / FRANCK ROBICHON).

Japón y Pfizer llegaron a un acuerdo para suministrar 120 millones dosis de dicha vacuna, suficiente para 60 millones de personas, algo menos de la mitad de la población nipona, estimada en unos 126 millones.

El país asiático también firmó acuerdos con la estadounidense Moderna y la británica AstraZeneca, responsables de las otros dos candidatas más prometedoras, para recibir dosis suficientes para cubrir a toda su población, cuando las desarrollen con éxito.

El parlamento japonés promulgó una ley a principios de este mes de diciembre para garantizar la gratuidad de la vacunación para los residentes del país, y ya había adelantado que en caso de que cause efectos secundarios graves, el Estado se hará cargo de los costes de los gastos médicos, compensación o pensión pertinente.

Estados Unidos y el Reino Unido ya han empezado las vacunaciones contra el COVID-19 con la vacuna desarrollada por Pfizer y su socio alemán BioNTech.

Los países han registrado varios casos de reacciones alérgicas graves a la inyección, lo que ha generado preocupación por la seguridad de la vacuna, desarrollada en tiempo récord, menos de un año, cuando la media es de al menos una década.

El programa de desarrollo de vacunas más rápido hasta ahora había sido el de los cuatro años que se tardó en fabricar la vacuna contra las paperas, autorizada en 1967.

Fuente: EFE