"Rechazo su veredicto", dijo el exmilitar Slobodan Praljak cuando el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) confirmó su sentencia de 20 años. Inmediatamente después sacó un frasco y bebió su contenido en la sala de audiencias.
Hoy las autoridades croatas confirmaron que Praljak murió "en un hospital tras beber veneno". El bosniocroata fue juzgado y sentenciado por crímenes de guerra cometidos en el conflicto entre croatas y musulmanes (1993-1994) que estalló durante la guerra de Bosnia (1992-1995).
Este incidente inédito ocurrió durante una audiencia en apelación a seis exdirigentes y jefes militares de los bosniocroatas.
Se produjo justo después de que los jueces confirmaran la condena a 25 años de prisión contra el exdirigente de los croatas de Bosnia, Jadranko Prlic, por el traslado de poblaciones musulmanas y por el recurso a asesinatos, violaciones y destrucciones de bienes civiles con el objetivo de crear una "gran Croacia".
Unos actos calificados por la acusación de crímenes de guerra y contra la humanidad cometidos durante la contienda bélica en Bosnia que causó más de 100 mil muertos y 2,2 millones de desplazados.