Esta combinación de imágenes de archivo muestra a Mike Pence y Kamala Harris. Ambos se verán las caras esta noche en el único debate televisado entre los candidatos a vicepresidente de Estados Unidos. (AFP / MANDEL NGAN - ERIC BARADAT).
Esta combinación de imágenes de archivo muestra a Mike Pence y Kamala Harris. Ambos se verán las caras esta noche en el único debate televisado entre los candidatos a vicepresidente de Estados Unidos. (AFP / MANDEL NGAN - ERIC BARADAT).

Washington. [AFP]. El tradicional debate entre los candidatos a vicepresidente en tendrá este miércoles el aliciente de que el presidente Donald Trump está contagiado por el coronavirus, lo que da un cariz especial al primer duelo entre su compañero de fórmula, Mike Pence y la demócrata Kamala Harris.

La enfermedad del mandatario de 74 años, sumada a las inquietudes sobre el estado físico y la edad de su rival, Joe Biden, que es tres años mayor, aumenta el interés por el encuentro entre los números dos, que se desarrollará en Salt Lake City, en Utah.

A menos de un mes de las elecciones del 3 de noviembre, la pandemia domina el debate antes de su inicio: ambos candidatos debatirán separados por una mampara, y se aumentará la distancia entre ambos a casi cuatro metros.

Esta podría ser una gran oportunidad de despuntar para la senadora Kamala Harris, una exprocuradora que tuvo un desempeño estelar en los debates de la primaria demócrata, aunque después no se tradujo en una mayor intención de voto.

Entre los temas que Harris (de 55 años) puede usar a su favor está la gestión de la pandemia que deja más de 209.000 muertos en Estados Unidos, el país con más fallecidos del mundo.

Este año el COVID-19 será la tercera causa de muerte entre los estadounidenses.

Con el anuncio del contagio del presidente, todos los ojos están puestos en Pence, de 61 años.

Este cristiano evangélico tradicional asistió a un evento en la Casa Blanca el 26 de septiembre para la nominación de la jueza conservadora Amy Coney Barrett a la Corte Suprema.

Aunque varios asistentes, incluidos el mandatario y su esposa dieron positivo desde entonces, Pence no se ha contagiado con el virus.

Un punto débil de Pence es su cargo como jefe de la célula de crisis para luchar con el COVID-19, pero a su favor tiene su trayectoria y su experiencia como locutor de radio, que le permitió tener un buen desempeño en el debate de los candidatos a vicepresidente en 2016.

Trump rezagado en las encuestas

El médico de la Casa Blanca, Sean Conley, dijo el martes que Trump, que recibió un cóctel de terapias experimentales, no reportó “ningún síntoma” de la enfermedad y seguía “extremadamente bien en general”.

Pero incluso desde el anuncio de su contagio, su posterior hospitalización, Trump mantiene su tenaz estrategia de bajar el perfil a la amenaza.

Y pese a las encuestas decepcionantes y a las críticas de una falta de empatía con las víctimas del coronavirus, el millonario republicano mantiene su tono desaprensivo frente a la pandemia.

Trump está rezagado en las encuestas nacionales frente a Biden y la pandemia pulverizó el mercado laboral y atizó el desempleo, quitándose uno de los mejores argumentos a favor de su gestión: una tasa de paro que llegó a tocar un mínimo de 3,5%, pero que ahora está en 7,9%.

Desde que fue dado de alta del hospital militar el lunes, el mandatario sugirió que quizás es “inmune” al virus y llamó a no temerle ni dejarse dominar por él.

En el otro lado del espectro está Biden, que respeta todos los consejos de los expertos y que mantuvo durante meses sus desplazamientos al mínimo. Según su adversario, el candidato demócrata usa la pandemia para evitar tanto a los votantes como a los periodistas.

Trump que se enfrentó en un debate a Biden el 29 de setiembre dijo el martes que se sentía “bien” y que está deseando que llegue el próximo encuentro, previsto para que el 15 de octubre.

Biden le respondió que se opondría a debatir con el presidente la próxima semana si éste todavía seguía enfermo con coronavirus.

Entrar “en la historia”

Los compañeros de fórmula de las presidenciales complementan a su manera a los candidatos a la Casa Blanca.

Pence es un abogado y cristiano ferviente, siempre en un segundo plano en contraste con la personalidad de Trump.

Harris, hija de un jamaiquino y una india tamil, desborda vitalidad al lado de Biden, que si es elegido en enero será el presidente de más edad en asumir el poder en Estados Unidos.

Si ganan los demócratas, Harris será la primera mujer en ocupar la vicepresidencia.

No puedo esperar a que Kamala Harris entre en la historia con el debate de mañana en la noche”, dijo en Twitter Biden.