El presidente boliviano Evo Morales aseguró que el fallo judicial de nueve años y medio de cárcel en Brasil contra el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva busca proscribirlo electoralmente.
"Quieren proscribir al hermano Lula, la oligarquía brasileña tiene miedo de su liderazgo y presencia en la Patria Grande", afirmó Morales desde su cuenta personal en Twitter, tras enterarse del fallo judicial, en un caso de corrupción y lavado de dinero.
"Toda nuestra solidaridad", añadió.
En tanto, la expresidenta brasileña Dilma Rousseff coincidió con Morales al señalar que que su antecesor Luiz Inácio Lula da Silva es "inocente" y que "las garras de los golpistas ahora intentan rasgar la historia de un héroe".
Rousseff, quien fue destituida el año pasado por irregulares manejos de los presupuestos, indicó a través de las redes sociales que Da Silva es víctima de una "flagrante injusticia y de un absurdo jurídico que avergüenza a Brasil".
Además, la exmandataria consideró a Lula como "el presidente más popular en la historia del país y uno de los más importantes estadistas del mundo en el siglo XXI" y agregó que, aun así, "sufre una persecución sin cuartel" por parte de los tribunales y sus adversarios.
Rousseff señala que la sentencia busca impedir su candidatura para las elecciones presidenciales de 2018, pues se encuentra a la cabeza de la preferencia de voto.
Lula, que lideró un gobierno de izquierda de 2003 a 2010, fue condenado el miércoles a nueve años y medio de cárcel por corrupción y lavado de dinero, un fallo que podrá recurrir en libertad pero que amenaza su eventual candidatura a las elecciones de 2018.
El gobernante boliviano, que varias veces criticó a la justicia brasileña por el trato a Lula y a su sucesora, la destituida Dilma Rousseff, acotó que "hay una cacería de brujas" en Brasil.
Morales, un indígena de tendencia izquierdista, solía llamar a Lula como "un hermano mayor", porque declaró que él le dio consejos, apenas se instaló en la presidencia boliviana en enero de 2006.