Tras el caso de Kim Davis, cristiana quien fuera encarcelada por negarse a casar a una pareja de lesbianas en Estados Unidos, un nuevo caso ocurrió esta vez en Francia.
Una funcionaria pública de la ciudad de Marsella recibió una pena de cinco meses de prisión suspendida por negarse a casar una pareja de lesbiana, así lo confirmó la fiscalía de ese país.
Además la mujer deberá pagar una multar de 1200 euros.
La mujer se negó a realizar la unión en agosto del año pasado alegando motivos religiosos. Sin embargo ese mismo día casó a cuatro parejas heterosexuales.
A diferencia de Estados Unidos dónde la Corte Suprema hizo legal el matrimonio homosexual en todo el país este año, en Francia este ya es legal desde el 2013.