Guerra en Siria ha convertido a los niños en sustento de familias refugiadas
Guerra en Siria ha convertido a los niños en sustento de familias refugiadas

La guerra civil en , que el pasado marzo cumplió cuatro años sin ninguna señal de solución, ha convertido a los niños en el principal sustento de gran parte de las familias que huyeron del conflicto y están refugiadas en alguno de los países vecinos, dijo hoy Unicef.

El  sostuvo que los menores también son los principales proveedores del escaso dinero que pueden conseguir para sus hogares dentro de Siria.

Esta situación está empujando a cada vez más niños a la explotación laboral.

Según un sondeo efectuado entre familias refugiadas en Jordania, en más de tres cuartas partes de ellas los niños contribuyen al ingreso familiar.

El caso del Líbano, son el único sustento en más de la mitad de casos, con niños de hasta seis años que deben trabajar para intentar ganar algún dinero.

La guerra, que empezó con manifestaciones prodemocráticas que degeneraron en uno de los peores conflictos armados desde la Segunda Guerra Mundial, ha empujado al 68 % de la población a la pobreza extrema.

Asimismo, más de 220.000 personas han muerto en las hostilidades.

Antes de esta crisis, Siria se ubicaba en la categoría de países de ingresos medios, la gran mayoría de habitantes tenía una vida decente, prácticamente todos los niños estaban escolarizados y el nivel de alfabetización era del noventa por ciento.

Según Unicef, una parte de niños sirios trabajadores están empleados en condiciones peligrosas y cumplen tareas que afectan seriamente su salud y bienestar, sea porque trabajan largas horas, en un entorno insano o utilizando sustancias peligrosas, en labores agrícolas, por ejemplo.

Los más vulnerables entre los niños que trabajan están involucrados en actividades bélicas, en la explotación sexual y en actividades ilícitas de mendicidad y tráfico de menores.

Cuatro años y medio de conflicto han hundido a Siria en la miseria, con más de la población desplazada y cuatro millones que han buscado refugio en los países más próximos.

De estos refugiados, dos millones son niños y de estos muchos ya sufren las consecuencias de los trabajos que realizan.

La investigación de Unicef encontró que la mitad de niños trabajadores que viven en el campamento de Zaatari -el más grande que alberga refugiados sirios en Jordania- tiene ya algún problema de salud por esta razón.

Unicef enfatizó que la única manera de cambiar esto es ofreciendo algunos medios de subsistencia a las familias, dando educación a los niños y luchando contra las peores formas de trabajo infantil.