Papa Francisco acepta renuncia de tres obispos chilenos tras escándalo de abuso sexual
Papa Francisco acepta renuncia de tres obispos chilenos tras escándalo de abuso sexual

Este lunes 11 de junio, el aceptó la renuncia de tres obispos chilenos relacionados a casos de abuso sexual y pedofilia en este país.

Como se recuerda, el pasado 18 de mayo, el conjunto del episcopado chileno presentó su dimisión conjunta tras una serie de reuniones con el papa en el Vaticano.

(*Foto: el papa Francisco junto al obispo chileno Juan Barros durante su visita a Chile en enero de este año/AFP)

Sin embargo, lo que más ha llamado la atención, es la renuncia de obispo J, quien fue nombrado por el papa Francisco en la diócesis de Osorno (sur de) en enero del 2015.

Barros se encuentra acusado de encubrir varios casos de abuso sexual a menores por parte del sacerdote chileno Fernando Karadima, condenado en 2011 por el Vaticano a una “vida de oración y penitencia” luego de que la justicia de dicho país declarara prescritos los cargos por abuso sexual.

"Empieza un nuevo día en la Iglesia católica de Chile! Se van tres obispos corruptos y seguirán más. Emocionante por tantos que han luchado para ver este día. La banda de obispos delincuentes @episcopado_cl se empieza a desintegrar hoy!", reaccionó en Twitter Juan Carlos Cruz, una de las víctimas de Karadima.

El "mea culpa" de Francisco

(*Foto: AFP)

Uno de los errores que el papa Francisco ha admitido abiertamente es el de no creer, durante la visita que realizó a Chile este año, que las acusaciones por abuso sexual hacia muchos obispos eran ciertas.

Como se recuerda, el Sumo Pontífice estaba convencido de la inocencia de Barros, lo cual generó mucha indignación en el país.

"El día que me traigan una prueba contra el obispo Barros, voy a hablar. No hay una sola prueba en contra, todo es calumnia", lanzó entonces el pontífice argentino a la prensa chilena.

“Con vergüenza debo decir que no supimos escuchar y reaccionar a tiempo", fueron las palabras del papa en una carta abierta a los chilenos en mayo, después de que se le brindaran suficientes pruebas.

Ahora, el papa Francisco se encuentra en una lucha por eliminar a las “lacras” , término que él ha utilizado para calificar a los obispos y miembros de la iglesia acusados por estos delitos.