Basta de soltar a los ladrones

No soy un experto en material legal, pero siento cierta envidia por el sistema judicial de los Estados Unidos, donde los infractores -así sean ricos y famosos- pagan sus penas haciendo trabajo comunitario. Acá en el Perú existe este tipo de fallos, pero pocas veces vemos a un ladrón de celulares cumpliendo tal obligación; por el contrario, no pisan la cárcel por tratarse de un delito menor y vuelven a delinquir.

Nuestro sistema judicial a veces es tan confuso que rara vez estamos de acuerdo con las resoluciones de los magistrados. Por ejemplo, si una persona roba y mata puede recibir una pena de 35 años o cadena perpetua, pero si “solo” asesina a alguien, existe la posibilidad de que su condena se reduzca y reciba unos 15 años. O sea, un criminal puede decir que tenía la intención de acabar con la vida de su víctima y no robarle, por lo que le aminoran la pena. ¿Extraño, no?

Entonces, volviendo a los trabajos comunitarios, por qué en vez de soltar a estos pillos reincidentes, quienes saben que por un reloj nadie los va a meter presos, no los mandamos a que limpien y pinten las calles, mantengan los parques, saquen los residuos de las playas, recojan la basura, entre otras labores que pueden ayudar a resarcir el daño que le hacen a la sociedad. De repente así se corrigen, porque esa es la idea. ¿Acaso les pagan a las víctimas el tratamiento psicológico que necesitan?

Si gustan pueden hacer su trabajo con la ropa que deseen, como para evitar ser señalados por su pasado y presente, pero algo deben hacer estos ladronzuelos que conocen la ley más que cualquier ciudadano de a pie. Meterlos a la cárcel es darle una maestría en delitos mayores, encima que tendríamos que seguir manteniéndolos con nuestros impuestos.

Ojalá alguna autoridad se ponga los pantalones y proponga que los delitos menores también tengan una pena efectiva, menor, pero que se cumpla. La población está cansada de que el mismo ratero que le roba los espejos del auto siga campante caminando por las calles al acecho de otro descuidado. ¿Hasta cuándo vamos a permitir esto?

PD: Una asidua lectora me corrige. En mi columna de ayer puse Bactrín en alusión a la pastilla contra la infección estomacal Bactrim. Gracias.