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Aquellos ciudadanos que durante mucho tiempo tuvieron la oportunidad de saltar a cargos públicos formando movimientos o agrupaciones políticas para determinados procesos electorales ahora tendrán un serio problema para cumplir con su objetivo, ya que se aprobó el proyecto de ley que limita la participación de grupos de alcance distrital y regional.

Esta es una norma que genera controversia; sin embargo, en la medida que pueda aplicarse con los objetivos previstos, puede ayudar a consolidar los partidos políticos, objetivo que tanto se busca desde hace varios lustros en beneficio de nuestra democracia. En los últimos años, durante los diferentes procesos electorales, aparecieron muchos movimientos distritales y provinciales que al culminarse los comicios se disolvían sin rendir cuentas sobre sus gastos; incluso quienes alcanzaban el triunfo dejaban únicamente a los líderes.

No obstante, se cierra la oportunidad a aquellos vecinos que destacan en su jurisdicción y no son partícipes o no comulgan con los ideales de un partido.

Como toda ley, lo aprobado va a generar opiniones encontradas; por tanto, se debe seguir buscando consenso entre las diferentes bancadas para tener un sistema moderno y democrático, con partidos sólidos y de gestión transparente.

Ya se legisló sobre el tema de los aportes económicos a los partidos, la prohibición de candidatear a sentenciados en delitos graves y otros. Se espera que estas medidas apuesten por una verdadera reforma electoral, que tanto se reclama en favor de consolidar la democracia.