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Pasados ya casi dos meses del relevo en Palacio, una de las preguntas más interesantes que planteó ayer la Encuesta Nacional Urbano-Rural de Ipsos fue: ¿Qué actitud cree que debería tener el Congreso de la República con relación al Gobierno?

Y es que ahí está el quid del asunto. Lo que haga o deje de hacer el presidente Martín Vizcarra dependerá en gran medida de la posición que asuma este Parlamento de mayoría keikista que, por ejemplo, no perdonó la vida a PPK y lo mandó al paredón de la renuncia.

Un 61% sugiere una postura de cooperación, porque el país requiere el trabajo convergente del Legislativo y el Ejecutivo para atacar la diversa problemática. Y un 30% demanda una oposición responsable, que apoye lo bueno y critique todo lo malo. En buena cuenta, la gente pide ¡no al obstruccionismo!

Y los ojos están puestos sobre todo en Fuerza Popular, el Partido Aprista y el Frente Amplio, a los cuales sindican con 51%, 55% y 38%, respectivamente, de realizar una oposición que busca el enfrentamiento con el Gobierno, según el mismo sondeo de opinión.

Bajo esta perspectiva, resultará gravitante la próxima confección de la Mesa Directiva 2018-2019. Bancadas como Acción Popular y Alianza Para el Progreso consideran que debe haber una alternancia porque, además de que las fuerzas se han reacomodado, la tienda “naranja” y el APRA ya han estado al mando del Legislativo.

Nosotros suponemos que, en un año electoral, la orden será hacerse los generosos y desprendidos, porque está claro que la calle quiere que se vayan todos precisamente por tanta zanganería, zancadillas y escándalos.