GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

Está por cumplirse un año de la salida del río Piura por acción del Niño costero, que afectó la propia ciudad, incluyendo la Plaza de Armas, y zonas bajas como Catacaos, Chato Chico, Cura Mori y otras. Sin embargo, tengamos presente que el único drama de la mencionada región no fueron las aguas desbordadas, sino también la epidemia de dengue que fue muy mal manejada por el Ministerio de Salud, por lo que es de esperarse que las cosas hayan cambiado.

Recordemos cuando a los pocos días del desborde del río, la gente acudía a los centros de salud pública de Piura con síntomas de dengue y se encontraba con que no había camas, pese a que era totalmente previsible una epidemia de este mal tras la emergencia. En muchos casos no había ni las más elementales pastillas de paracetamol destinadas a calmar los dolores y el malestar de esta enfermedad, que en algunos casos tuvo desenlaces fatales.

Las autoridades deben tener en cuenta que mucha gente sigue viviendo en albergues “temporales” tras la pérdida de cientos de viviendas, y que ante eso se deben tomar medidas para evitar los casos de dengue y chikungunya. En los últimos días ya hemos tenido 20 afectados confirmados, y un funcionario del Gobierno Regional de Piura ha advertido que hasta ahora Lima no transfiere el dinero ofrecido para las labores de fumigación. ¿Qué están esperando?

Ante situaciones como estas, no puede haber burocracia indolente de por medio. Lo que hay que hacer es atender a la población, como no se hizo el año pasado en que Piura vivió un doble drama: el descomunal desborde del río y la posterior epidemia que incluso se trató de minimizar desde el Ministerio de Salud al calificarla de “sicosocial”, mientras la gente pugnaba por ser atendida en los pasillos de las postas ante la falta de capacidad.

La desgracia de hace un año debió dejar una gran lección, que ha debido traducirse en un trabajo de prevención para evitar una nueva epidemia, especialmente de dengue. La región norte, y en especial Piura, ha sido muy golpeada como para dejar a su gente otra vez a su suerte. El ministro de Salud, Abel Salinas Rivas, y las administraciones regionales, están en la obligación de actuar de inmediato.

TAGS RELACIONADOS