Días difíciles

Son días difíciles para el pueblo venezolano. En su país, la crisis económica se agrava y obliga a muchos de sus ciudadanos a migrar para sobrevivir. En el Perú se decidió, en consonancia con la tendencia regional, que sin un pasaporte no eran aptos para poder ingresar al territorio, lo cual ha generado un éxodo hacia nuestro país antes de que entre en vigencia dicha disposición, dadas las limitaciones que existen para obtener este documento.

Mientras tanto, parte de nuestra clase política ha mostrado no solo sus peores miserias, sino también falta de liderazgo y empatía con la situación. Así, por ejemplo, en la campaña municipal de Lima el tema ya ha empezado a tener un rol estelar, y desde el Poder Ejecutivo no hemos visto argumentos serios para sustentar el cambio de política migratoria.

Por ello, creo que es momento de buscar soluciones efectivas a este problema. Seamos claros: los venezolanos no dejarán de venir. Son personas que están peleando la subsistencia de su familia, y cualquier cosa es mejor que el infierno que viven. Con las nuevas barreras, solo se convertirán en blanco fácil de la trata y la explotación.

Es necesario entonces ver el problema de manera integral. Ecuador ha convocado a una reunión de alto nivel para analizar el tema a nivel regional. Es importante no solo participar sino buscar alternativas serias que ayuden a superar esta crisis.

En paralelo, el Ejecutivo no puede seguir siendo silenciosamente cómplice de campañas xenófobas. Es importante que las autoridades sean claras y precisen la información que circula en redes sociales. Se necesita liderazgo en el tema.