El Ministerio del Interior, a través de la Dirección General de la Policía Nacional, ha mentido y engañado a la región Arequipa. A fines de enero, bajo el cuento de capacitar a 294 efectivos en antimotines, se los envió a Lima para “apoyar” en la seguridad de la capital.

Sin embargo, todo fue una burda mentira de las autoridades del Interior, ya que el 19 de febrero, mediante Resolución Directoral 001491, se dispone el destaque de los suboficiales de la REGPOL Arequipa a la REGPOL Lima, en claro abuso y prepotencia de quienes están al frente del sector.

A dicha tropa la tienen en un cuartel de la Costa Verde en Lima y por falta de camas duermen en el suelo, la alimentación es pésima y los tienen peor que a delincuentes purgando prisión.

Aquí debería intervenir la Defensoría de la Policía Nacional como Defensoría del Pueblo para ver si se respetan los derechos del personal.

Este abuso que se está dando merece investigarse, pues aparte de engañar a Arequipa, que se quedó sin custodios, los actos delincuenciales en la ciudad aumentaron de manera peligrosa y de ahí frecuentes informaciones de actos delincuenciales que se difunden a través de los diferentes medios de comunicación.

Los propios jefes de la PNP en Arequipa reconocieron el déficit de personal en la región.

La decisión del director de la PNP, recibiendo órdenes del ministro del Interior, es errada, pues aparte de no pagarles ni un sol a los suboficiales por traslado, están “desvistiendo un santo para vestir a otro”.

En Arequipa, hoy faltan al menos un millar de policías, y con este traslado antitécnico se ahonda la inseguridad que comienza a imperar en diferentes distritos, donde los asaltos a mano armada y a plena luz del día son más frecuentes.