GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

Las redes sociales nos han sumergido en una cultura del espectáculo y del espectador sin precedentes en nuestra historia. Por todos lados, nos vemos rodeados de mensajes, “stories” que nos seducen visualmente y anuncios que nos reclaman. Las empresas compiten para captar nuestra atención con ferocidad y van estudiando, con cada vez mayor precisión, cuáles son las fórmulas que pueden aplicar de acuerdo a cada segmento. Algunas veces, pareciera que no podemos escapar de esta realidad y que estamos condenados a ser esclavos de nuestras redes sociales y todo lo que nos rodea. Sin embargo, está completamente en nuestras manos hacer un uso productivo del entretenimiento.

“Uso productivo del entretenimiento… ¡qué aburrido!”, pensarán algunos. Es, en realidad, al contrario. Un uso productivo del entretenimiento significa ponerlo en valor para nosotros mismos y usarlo de insumo creativo para nuestra vida. Por ejemplo, una novela que nos gusta nos puede dar mucha información sobre códigos sociales, nos puede enseñar a resolver conflictos, nos puede proveer de empatía. Ver la novela pasiva y acríticamente, sin embargo, no. Necesitamos tomar acción. Necesitamos ver, incorporar, dar un paso más. Para incorporar un aprendizaje, debemos ponerlo en contexto. ¿Cómo relaciono esto que estoy observando con un aspecto de mi propia vida? No es necesario hacer un ensayo sobre el tema. Lo importante es activar constantemente la reflexión y afinar nuestra lectura e interpretación de la realidad.

Se trata de renunciar a ser impactados por los mensajes de forma pasiva. Hoy en día, muchas veces nos comportamos así frente al contenido: “Pasaron 5 segundos de video, si no estoy completamente entretenido, cambio”. La lógica de las redes nos está llevando a actuar como niños pequeños esperando ser entretenidos constantemente. Pero nosotros debemos activarnos para entretenernos, porque nada ni nadie puede hacer ese trabajo por nosotros. Es un esfuerzo que bien vale la pena.

TAGS RELACIONADOS