La salida de Martín Vizcarra del ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) ha sido un duro golpe no solo para el Gobierno central, sino también para no pocos gobiernos regionales, que coordinaban algunas megaobras con el ministro renunciante y ahora temen que todo lo avanzado se detenga.

El gobernador regional de Junín, Ángel Unchupaico, lamentó la salida de Vizcarra y dijo que puso “las manos al fuego” por la autopista de cuatro carriles que uniría a Lima con las ciudades del centro del país, como alternativa a la colapsada Carretera Central.

“Cuando estuvimos reunidos en el despacho del presidente Pedro Pablo Kuczynski, este le preguntó a Vizcarra si era viable el proyecto de la autopista que proponíamos junto al gobernador regional de Lima, Nelson Chui, y él respondió que sí”, comentó Unchupaico. Ahora está preocupado por que se retrase la llegada del presupuesto para esa gran obra.

Otro gobernador regional que lamenta la renuncia de Vizcarra es Glodoaldo Álvarez, de Huancavelica. Es que el ministerio de Transportes y Comunicaciones ya había acogido la propuesta del proyecto de la Carretera Tipicocha-Cañete-Lima, la cual reduciría el tiempo de viaje de Huancavelica a la capital peruana a ocho horas.

Todos esperan que los proyectos continúen y que el Estado cumpla con concretar lo que ya se inició. Es evidente que un gran aliado de los gobiernos regionales fue Martín Vizcarra, a quien consideraron siempre como uno de ellos, ya que comprendió las necesidades y urgencias de las regiones del Perú profundo.

Sin embargo, hay una buena noticia, la ministra de Justicia, Marisol Pérez Tello, ha dicho que Vizcarra seguirá trabajando y visitando las regiones.