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Pese al optimismo que existe en el presidente de la República, Martín Vizcarra, la situación del país no se presenta del todo favorable. En los últimos días, los minerales, en especial el cobre, han sufrido una baja en su cotización y de seguro eso afectará en parte la recaudación de recursos para el Estado.

Estamos en un año electoral y las nuevas autoridades que asuman el cargo el próximo año encontrarán varios proyectos de desarrollo paralizados, en parte por la falta de recursos que financien su ejecución, esto si no se mejora de manera urgente la recaudación tributaria, pues actualmente es bastante reducida, como lo reconoció el Presidente, quien se propone elevarla del 12% al 14% del PBI.

Lo que preocupa, además, es el destrabe de proyectos detenidos por varios años, y eso, en gran parte, por falta de decisión política.

Que a fin de año se inicien los proyectos mineros de Mina Justa (Ica) y Quellaveco (Moquegua), como también la ampliación de Toromocho (Junín), como lo ha expresado el jefe de Estado por un monto cercano a los 10 mil millones de dólares, es muy optimista; empero, no se trabaja para acelerar otros que revisten igual o mayor importancia para el desarrollo del país.

Vizcarra inaugurará hoy en Moquegua el IV Congreso Internacional Sur Minero y la II Feria de Exposición Minera, oportunidad en la cual, de seguro, hablará sobre las perspectivas para la región, como para el resto que son parte del sur, en especial de los proyectos estancados por la falta de recursos y complicados debido a actos de corrupción, como el Gasoducto del Sur.

Las autoridades son las encargadas de hacer entender a la población sobre la importancia de estas inversiones que permiten generar ingresos para atender la infinidad de demandas de la población.