El partido de Kenji

Kenji Fujimori ya aprendió a actuar políticamente. No solo no asistió a las reuniones de bancada donde debatieron su castigo y tenía derecho a defenderse, sino que esperó el momento oportuno para renunciar a Fuerza Popular.

Kenji no tiene una buena relación con su hermana Keiko, y es porque mientras él tenía como tema principal de agenda la libertad de su padre, ella tenía otras prioridades. Recordemos el día de las elecciones: mientras ella se exponía sonriente a las cámaras en un desayuno familiar, él estaba parco en un extremo de la mesa; e incluso no fue a votar.

Ahora comenzará con la gran tarea de formar el partido propio.

Los “Avengers”, ese grupo de disidentes de Fuerza Popular que están con Kenji y que puede ir incrementándose, serán los encargados de conseguir las firmas para asegurarse un lugar de privilegio en la lista, ayudados por algunas bases leales al “Chino”.

Por otro lado, Barata ha enturbiado el panorama político y ha enlodado a muchos, entre ellos a Keiko, lo cual nos lleva a pensar que si sale bien librada judicialmente y postula, sus posibilidades serán mucho menores que las anteriores, por lo que Kenji ve que su momento habría llegado.

El grupo de Kenji irá creciendo gradualmente. Cuando algunos vean que sus posibilidades de ir con Keiko y reelegirse son mínimas, entonces volverán los ojos hacia Kenji para intentar seguir viviendo de las ubres del Estado.

NOTA: En la columna antepasada dije que el libro El expediente Prado, del congresista Víctor Andrés García Belaunde, tiene inexactitudes, y lo sostengo a pesar de que ha enviado una carta al diario donde dice que no he leído su libro. Lo reto, congresista, a un debate en el día y medio que usted decida.