Muchas personas que han ocupado posiciones importantes o de “poder” y que súbitamente, por una razón u otra las han perdido, han vivido en carne propia lo que significa ser alabado e idolatrado y rápidamente olvidado. Arnold Schwarzenegger, famoso actor y ex gobernador del Estado de California, publicó una foto durmiendo en la calle, en un sleeping bag, debajo de su propia estatua de bronce ubicada frente a un lujoso hotel inaugurado por él mismo en sus tiempos de gloria y en el que le habían ofrecido mantener “siempre” una habitación disponible para cuando lo quisiera.
Sin embargo, cuando renunció al cargo y varios años después quiso ocupar la habitación ofrecida, no solo se lo negaron, sino que, además, le requirieron el pago. Reflexionaba sabiamente este actor y expolítico, con magistral claridad, lo que significaba ostentar el poder y perderlo: “Cuando estaba en una posición importante, siempre me felicitaban y alababan, y cuando perdí esta posición, se olvidaron de mí y no cumplieron su promesa”. “No confíes en tu posición ni en la cantidad de dinero que tienes, ni en tu poder o tu inteligencia, eso no durará para siempre”, tratando de enseñarle a todos que cuando eres “Importante” ante los ojos de la gente, todos son tus “amigos”. Pero una vez que no beneficies o suplas sus intereses, no importarás más. “No siempre eres quien crees que siempre serás, nada dura para siempre”.” La gente va y viene; los intereses de cada cuál cambian de la noche a la mañana. Hoy pueden abrazarte y mañana traicionarte e incluso pisotearte.
El desafío entonces, es aprender a escoger bien nuestras conexiones, desconectándonos de los tóxicos y oportunistas y tomarnos el tiempo para colocar en nuestros círculos de confianza, a aquellos que nos amen por lo que somos, y no por lo que nos puedan sacar por interés, o rechazar por desinterés”. La vida, finalmente, es un espacio de luz efímero entre la nostalgia de lo que aún no se ha vivido y lo que ya no se podrá vivir: no desperdiciemos por ello ni un solo instante en añorar lo que se tuvo y lo que ya pasó.