El Congreso de la República aprobó un dictamen que permite el retiro de fondos de la ONP hasta 4 mil 300 soles. La gran mayoría de legisladores entiende que la norma se justifica porque es momento de proveer de dinero a millones de peruanos. Algunos de los congresistas defendieron su voto con discursos inflamados como si el Estado fuera una abstracción opresora que se apropia de los aportes de trabajadores y extrabajadores.

Lo cierto es que en un país con grandes desequilibrios sociales y económicos los fondos públicos deben ser manejados con mucho cuidado. No puede ser que decisiones apresuradas, electoreras y sin un análisis serio afecten la capacidad de gasto del Gobierno para programas sociales e inversión pública. “La medida va a costar casi dos puntos del PBI”, dijo al respecto el exministro de Economía David Tuesta.

Si los congresistas quieren construir un balance más equitativo a favor de los aportantes, debe haber una visión que incorpore una reforma integral del sistema de pensiones. Con la medida aprobada hace dos días puede dar la impresión que es una acción a partir de intereses políticos y de la búsqueda de un posicionamiento electoral antes que una evaluación seria. Las iniciativas populistas , al final, son nocivas  para la gente.

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