Sería bueno que los peruanos sepamos qué arreglo bajo la mesa hay entre las diversas bancadas del Congreso para que Josué Gutiérrez Cóndor, abogado del corrupto Vladimir Cerrón y vergonzante ayayero de Nadine Heredia en los tiempos en que la señora compartía ilegalmente el poder con su esposo Ollanta Humala, quien admitió una vez que el suyo era un “gobierno familiar”, sea uno de los candidatos finalistas para ocupar el importante cargo de defensor del Pueblo que está vacante desde hace más de un año.
Es una lástima que tras un largo proceso de elección de defensor del Pueblo, el cual se vio entrampado por la intervención del Poder Judicial que absurdamente impidió en su momento que el Congreso cumpla con su rol constitucional de seleccionar a dicho funcionario, tengamos como uno de los dos candidatos finalistas al abogado Gutiérrez Cóndor, propuesto por la bancada de Perú Libre, el partido de Cerrón que llevó al poder al ahora recluso Pedro Castillo y que sueña, según su ideario, con ver a nuestro país convertido en una nueva Cuba o Venezuela.
Gutiérrez Cóndor ha sido hasta hace poco asesor de la bancada cerronista. Antes fue abogado del exgobernador de Junín sentenciado por corrupción, y entre 2011 y 2016 se desempeñó como congresista elegido por el desaparecido Partido Nacionalista encabezado por Ollanta Humala. Mientras era legislador se hizo “famoso” por tener en su despacho una foto gigante en la que aparecía al lado de la entonces primera dama, Nadine Heredia, a la que un día llamó “presidenta” delante de un grupo de periodistas.
Con esos antecedentes, resulta inexplicable que por mérito propio el abogado Gutiérrez Cóndor esté siendo tomado en cuenta para ser el próximo defensor del Pueblo. A eso se suma que en su hoja de vida no hay algo destacable más allá de su profesión de abogado y su paso por el Congreso, que dejó más sombras que luces. ¿Qué fue lo que ha llenado el ojo a los congresistas de diferentes bancadas respecto de este escudero de Cerrón y Nadine Heredia? Sería bueno saberlo antes que se ponga día y hora para la elección en el pleno.
El país merece un defensor a la altura del reto, no un personaje con oscura carga política ni que sea producto de una repartija o acuerdo bajo la mesa. El otro candidato finalista, Jorge Rioja Vallejos, propuesto por Bloque Magisterial y Acción Popular, bancadas bastante cuestionadas, tampoco muestras las luces mínimas para el cargo. Por eso, lo más saludable sería que el Congreso se lave la cara ante los peruanos y presente otra terna, en lugar de estar tratando de poner la Defensoría del Pueblo al servicio de oscuros intereses.