Mientras los peruanos durante los últimos días estaban pendientes de las elecciones generales, que se realizaron ayer, otro tema inquieta a los gobernadores de los departamentos de la región sur: el futuro del gasoducto.

El tema de fondo es el anuncio de las ventas de las acciones de Odebrecht a sus socios Energas y Graña y Montero, que, como se sabe, dicho consorcio se encuentra implicado en problemas de corrupción en Brasil como en otros países.

Esta transacción comercial, como se deslizó tal posibilidad, podría provocar la paralización del Gasoducto Sur Peruano (GSP) y con ello sufrir la postergación del proyecto en su ejecución, el cual es considerado de mayor importancia para el desarrollo de las regiones de esta parte del país.

Tal situación generó la reacción de los gobernadores regionales, quienes esbozaron un pronunciamiento que será público en las siguientes horas.

Por lo pronto, la gobernadora de Arequipa y presidenta de la Mancomunidad de la Macrorregión Sur, Yamila Osorio, sostendrá mañana una reunión de urgencia con el viceministro de Energía, Raúl Pérez-Reyes Espejo, según señaló en entrevista con Correo.

En tanto, en Cusco, el gobernador regional, Edwin Licona, consideró que la decisión de Odebretch de retirarse del proyecto Gasoducto Sur Peruano no afectará en nada su ejecución, y hasta resultaría beneficioso, ya que es una empresa inmersa en un escándalo internacional.

Los gobernadores de Arequipa, Cusco, Puno, Tacna y Moquegua deben estar informados sobre lo que pueda ocurrir en los siguientes meses y conseguir el compromiso del próximo gobierno que garantice su continuación.

La Mancomunidad tiene la responsabilidad de transmitir la preocupación y encontrar respuestas.