Por años la agricultura ha sufrido la presencia de la mosca de la fruta, al extremo que nos bloqueó la oportunidad de tener mejores exportaciones que beneficien directamente a los hombres del campo.

A pesar de las campañas que se realizan, Tacna y Moquegua son las únicas regiones que lograron erradicar dicha plaga y que tiene marcada presencia en otras localidades. En ambas jurisdicciones, el trabajo que despliega el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) es interesante y persistente, situación que le permite mantener el rótulo de ser zona libre de la mosca.

En los últimos días, Tacna se vio “sitiada” por los comerciantes de la fruta, quienes cuestionaban al Senasa por los controles que realiza y dejaron de trasladar productos a los diferentes mercados de la región, provocando un desabastecimiento y afectando a los consumidores.

Empero, cabe indicar que estas exigencias son necesarias para no perder ese estatus de zona libre de la mosca de la fruta, labor respaldada por los Productores de la Región Tacna, quienes cuentan con la certificación para sus 34 mil hectáreas de cultivos.

En Arequipa se llevan a cabo campañas frecuentes y el Senasa con nuevos controles instalados en los puntos estratégicos, como los del aeropuerto, está en camino para erradicar dicha plaga en el 2017.

El accionar que se realiza en las garitas debe continuar para que productos como la uva, palta, páprika y otros tengan las condiciones para su exportación a nuevos mercados del mundo.

En este esfuerzo desplegado, el Gobierno tiene que seguir potenciando al Senasa, dotándole de los recursos necesarios y el instrumental que se requiere, pues solo así la agricultura comenzará a tener el valor del caso.