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Keiko Fujimori ha salido a respaldar al presidente del Congreso de la República, Luis Galarreta, en dos temas que este último no supo manejar: la compra de electrodomésticos para la institución y el ataque a los medios de comunicación. Aunque este último atañe a un proyecto de ley promovido por el parlamentario aprista Mauricio Mulder.

Sobre la compra de televisores y otros enseres en el Parlamento, parece hasta un caso anecdótico que se quiera hacer un drama por un peculiar gasto. Sin embargo, el plato de fondo es la manera en que Galarreta ha respondido a los periodistas, en una clara agresión de quien debe conducirse medianamente sereno frente a una ley aún en proyecto.

Si el propio titular del Legislativo refiere que de todas maneras aprobarán la Ley Mulder, a la que él denomina contra “la prensa mermelera”, entonces parece que el debate no es propio de su cultura política ni la de su bancada. Al menos así lo ha dejado entrever la última declaración de la lideresa de Fuerza Popular.

“Así como el Gobierno ha dado un decreto de urgencia que busca la austeridad, creo yo que este proyecto también lo que busca es (que) los recursos públicos sean utilizados con prioridad para la construcción de obras y de colegios, y no tanto para la utilización del autobombo que muchas veces se ha venido dando, sobre todo en gobiernos pasados”, afirma Keiko Fujimori.

De esta manera, la propia manifestación de la excandidata a la Presidencia de la República confirma lo adelantado por Galarreta, en el sentido que de todas maneras la Ley Mulder será aprobada, haya o no debate de por medio.

Consideramos que no le hace bien a la política que un presidente de un poder del Estado quiera saltarse el debate previo a la aprobación de un proyecto de ley que, si bien tiene el propósito de no despilfarrar el dinero, según su autor, debe pasar por el análisis previo de los sectores responsables en beneficio de los ciudadanos.