¿Cuáles son las condiciones hacen posible la política como una actividad genuinamente humana? La tarea de fomentar una cultura promotora de las libertades civiles y políticas, produce comunidades con una ciudadanía robusta y capaz de sostener la institucionalidad. Los ciudadanos libres saben que el gobierno no debe invadir su esfera privada y personal. Sobre esta idea, los anglosajones dieron origen a obras clásicas como “Sobre la libertad” de John Stuart Mill y “El segundo tratado sobre el gobierno civil” de John Locke; la teoría constitucional clásica y las garantías del debido proceso (Due process of law). En las dictaduras no existe un verdadero ejercicio de la política, sino que es la antipolítica, pues, el gobierno quiere perpetuarse en el poder y toma decisiones sin ningún control de oposición. No se busca el bien común sino el individual.
La política se desarrolla mediante el ejercicio del poder en libertad, facilita la participación del gobierno y una oposición instalada en una asamblea parlamentaria electa con voto libre, universal y secreto. La tarea de alcanzar el bien común compete a todos los representantes políticos, no a una parte de ellos; lo contrario es dictadura. Los países más libres han abrazado la democracia y la constitucionalidad como un conjunto de principios que protegen los derechos humanos y establecen reglas para un buen gobierno civil. El Profesor Bernard Crick acertó cuando sostuvo en sus obras que no todas las comunidades son capaces de practicar un verdadero ejercicio de la política.