En los últimos tiempos tiene sentido que se hable mucho de la importancia de las medidas de bioseguridad para el desarrollo de las clases presenciales. Sin embargo, creo que es importante tener presente que este año escolar tiene que ser diferente a los anteriores al 2020. Sobre todo, las primeras semanas en que se reencuentran los estudiantes con sus maestros después de un período donde los alumnos y sus familias han vivido 2 largos años de enclaustramientos, vivencias entre la vida y la muerte, la salud y la enfermedad, dificultades económico- familiares, entre otras.

Son 2 años en que los niños, niñas y adolescentes han tenido clases a distancia muy variadas. Un sector ha tenido clases virtuales sincrónicas aceptables, pero la gran mayoría clases por radio y televisión(Aprendo en Casa) si secuencia curricular . Lo grave es que se afirma que por lo menos cerca de un millón de alumnos no se habría podido conectar con regularidad a ningún tipo de actividades educativas.

Por todo lo señalado, es fundamental que los reencuentros de los alumnos con sus maestros se desarrollen en los colegios teniendo en cuenta que los escolares llegan con una afectación en sus aprendizajes y en su desarrollo afectivo. Y por lo tanto hay que privilegiar en las primeras semanas( en realidad durante un buen tiempo) lo siguiente: la escucha, el dialogo y la contención psicológica permanente según los grupos etarios para el bienestar socio-emocional ; revisar de manera adecuada los aprendizajes previos de la educación a distancia 2020 y 2021;dar atención a la recuperación de los saberes fundamentales de los 2 grados anteriores ; y recién después de estos procesos educativos aplicar pruebas sencillas de entrada con retroalimentación e iniciar el desarrollo de los nuevos aprendizajes. Hay que privilegiar estímulos educativos , de acuerdo a los saberes precedentes siempre para construir saberes significativos.