Ley Universitaria: cambios para avanzar

No comparto la postura de algunos voceros de descalificar cualquier planteamiento de modificatoria de la Ley Universitaria aduciendo que responde a intereses subalternos. Tampoco la afirmación de que está en marcha “la gran reforma universitaria en el Perú”. Una muestra es que al cabo de más de dos años no hay la intención de dotar con recursos para mejorar las condiciones de calidad y modernización de las universidades estatales en cuanto a docentes e investigadores, gestión educativa, así como a infraestructura, tecnologías y medios educativos. A propósito de la “pontificación” de la Sunedu, ¿tienen algún protagonismo actualmente los integrantes del directorio designados por concurso? ¿Lideran este organismo? Uno terminó sus funciones y el otro renunció (¿?).

De otro lado, en buena hora, es creciente la opinión de varios sectores y actores políticos, sociales y educativos con respecto a que esta ley debe ser materia de cambios. Por eso, creo que es indispensable y urgente que la Comisión de Educación del Congreso de la República promueva un diálogo alturado, plural y productivo para concertar una propuesta que asegure calidad y autonomía del sistema universitario. Debe ser para avanzar y mejorar. De ninguna manera para replicar a las inconvenientes ANR y Conafu. Pero tampoco para mantener la dependencia total de la Sunedu, como lo es hoy, del Minedu.

Propongo algunas ideas para el debate: la Sunedu está constituida por representantes altamente calificados de la academia, del Estado, de las empresas productivas y de las universidades públicas y privadas. El superintendente es elegido por mayoría calificada entre los integrantes de la Sunedu. Se toman en cuenta las observaciones de prestigiosos constitucionalistas.