GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

Veamos: 1) Desde el comienzo siempre sostuve que fue un error invitar a Nicolás Maduro a la Cumbre de las Américas y que fue más grave retirarle la invitación. 2) Acabamos de perder una inmejorable oportunidad para recomponer nuestra estrategia bilateral con Venezuela, siempre pensando en que la Cumbre no se vea afectada o por lo menos queden atenuados sus efectos por el creciente resentimiento del dictador llanero, que viendo perdidas sus aspiraciones de participar en la reunión hemisférica buscará encimar ante su inminencia conduciendo un cantado boicot por su desafuero. 3) La carta de desinvitación remitida por la Cancillería peruana era para no participar en la Cumbre. En ella no se dijo nada sobre la prohibición de ingresar en el territorio nacional. Maduro se ha aprovechado de este error diplomático para afirmar que vendrá de todas maneras amparado en el libre tránsito internacional, y hasta se ha especulado que podría venir en avión comercial y/o como parte de la comitiva oficial de otro jefe de Estado que sí participará en la Cumbre. 4) Frente a la actitud desafiante de Maduro, nuestras anteriores autoridades en Torre Tagle, como las recientes, que en realidad siguen siendo las mismas, caen en su juego, advirtiéndole que no lo dejarán entrar en el país por mar, aire o tierra. 5) Frente a ello solo nos quedaría hacer respetar nuestra soberanía. Ello supone el cumplimiento de la ley y el reglamento de migraciones previa calificación por el poder político de que su llegada al Perú constituye “una situación de peligro o amenaza para la seguridad nacional, el orden público, el orden interno…” (Art. 48). 6) El delicado tema se vuelve a ir de las manos de Torre Tagle, pues a estas alturas en que el flamante canciller Néstor Popolizio torpemente ha reiterado la desinvitación a la Cumbre, solamente que se decidiera permitirle que sí ingrese al país, será la oportunidad que está buscando para mofarse a sus anchas de nuestra autoridades por su falta de coherencia y carácter. 7) Una ventana abierta para una diplomacia de integración podría cambiarlo todo, pero Popolizio no quiere. Veremos.