Al parecer, la arremetida de los congresistas de Perú Libre contra la libertad de expresión y su afán de intervenir en la agenda de los medios de comunicación privados solo responde al ideario de su partido, elaborado por Vladimir Cerrón. “El socialismo no aboga por la libertad de prensa, sino por la prensa comprometida con la educación y la cohesión del pueblo”, dice una de sus máximas. Toda una declaración de intenciones que se ve reflejada en los proyectos de ley contra la prensa y los medios.

¿El resto de parlamentarios marcharán al compás de Perú Libre? ¿Los demás legisladores van a contribuir a tirarse abajo las libertades que dicen defender? Sería muy preocupante y nocivo ceder en cuestiones de libertad, pues ya se ingresaría al terreno de lo totalitario. Sería también un desprecio a los valores de la democracia y la Constitución, que aboga por el libre mercado. Ojo que imponer contenidos en las programaciones de emisoras radiales y canales de televisión privado no es otra cosa que vulnerar derechos empresariales.

Los proyectos que atentan contra las libertades solo generarían más desconfianza en el mercado, justo cuando la inversión privada cayó en 12% y la inversión directa extranjera cayó en 50% en los primeros tres meses del año. Las consignas autoritarias y el ánimo agitador de los congresistas de Perú Libre solo producirán más crisis. Está claro que esas leyes le importan más a ellos que a la ciudadanía.