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La figura de la Virgen María ha sido relevante en la política internacional. Lo voy a explicar. Hace 3 días hemos visto a todo el pueblo de México paralizado al celebrar -el 12 de diciembre- el 488° aniversario de las manifestaciones de la Virgen de Guadalupe en el Cerro de Tepeyac. La emblemática Señora de Guadalupe fue central durante la histórica Revolución Mexicana de 1910, que luego acabó con los más de 30 años en el poder del dictador Porfirio Díaz. Las huestes de Emiliano Zapata y de Pancho Villa, los personajes más relevantes de la referida Revolución, durante el fragor del conflicto encontraron en la venerada virgen la fuerza para lograr sus objetivos. La Revolución, como sabemos, triunfó y en México la Virgen María ocupa un lugar trascendente en el imaginario nacional azteca. Por esos mismos años, en plena Primera Guerra Mundial, la Virgen de Fátima, en Portugal, se aparece a tres pastorcitos, el 13 de mayo de 1917, dando señales al mundo de lo que se le venía. Eran los tiempos en que comenzaba a ganar espacio el ateísmo en algunos países europeos, principalmente, los que estaban asociados a la Revolución Bolchevique que ferozmente acabó con la Corte zarista de Nicolás II en Rusia, siendo eliminados el propio Zar y toda su familia.

Para los peruanos, sobre todo los norteños de nuestro país, la fiesta de la Virgen de la Puerta que hoy se celebra en la ciudad de Otuzco, en la bellísima serranía de La Libertad, marcó muchos episodios de la historia peruana, principalmente durante la etapa virreinal, pues su veneración cundió al erigirse su imagen en la entrada del pueblo durante el siglo XVII como custodia frente a los ataques de los piratas de la época, que nunca lo hicieron en Trujillo. La Virgen de la Puerta también tuvo enorme impacto durante la Campaña de la Resistencia en la sierra de La Libertad, donde las rabonas que acompañaban a Cáceres y sus soldados, durante la pausa de los enfrentamientos con los chilenos, se convirtieron en sus fervientes devotas. El papa Pío XII la ungió como “Reina de la Paz Universal” y Francisco, en enero de este año, la declaró en Trujillo “Madre de la Misericordia y de la Esperanza”.