Hemos seguido recientemente los esfuerzos del Ejecutivo y del Legislativo para aprobar el proyecto de ley para la reprogramación de deudas de ciudadanos y MYPES. Asimismo, cada semana esperamos con atención la estadística actualizada del BCR referida a los resultados de Reactiva Perú.
Es importante resaltar que al 30 de setiembre, más de 460 mil empresas formales recibieron créditos de Reactiva Perú, de las cuales, según el BCR, el 98% son micro y pequeñas empresas (Mypes). Todo esto es destacable y denota una preocupación de las autoridades por atender al vasto y prioritario sector de la micro y empresa del Perú. Sin embargo, es necesario considerar el conocimiento de la realidad de las MPYES del Perú.
Primero, es necesario reconocer que el sector de la micro y pequeña empresa no es homogéneo. Según la data oficial del PRODUCE, el sector de microempresas, es decir aquellas unidades económicas con ventas anuales menores a 150 UIT, representa el 96% de todas las empresas formales registradas a nivel nacional, mientras que solo el 3% del total es considerada pequeña empresa.
De este universo solo el 5,9% de MIPYMES formales (registradas en SUNAT) accedió al sistema financiero regulado, lo que significa que más del 90% de las micro y pequeñas empresas formales no tienen historial crediticio, ni antecedentes financieros en ninguna entidad financiera-bancaria, por lo tanto Reactiva Peru, Fae MYPE y el recientemente proyecto aprobado para refinanciar créditos está dirigido a menos del 10% de las Micro y Pequeñas Empresas formales.
¿Cómo hacemos para llegar al mayoritario segmento de las MYPES formales que no cuentan con historial crediticio?, ¿Cómo logramos afinar las políticas de apoyo y llegar a las millones de MYPES informales?
Por todo ello, consideramos que los funcionarios y tecnócratas del aparato estatal, deben tener presente estas características para garantizar el éxito de los programas que van dirigidos a las MYPES del Perú. Actualmente los fondos enfocados al sector no llegan al amplio de la micro y pequeña empresa, y creemos que justamente, esto se debe a la necesidad de poner bajo lupa la información relevante del sector y sus particularidades.
Por la diversidad de actores y sus características, es importante diseñar elementos diferenciados tanto para las micro empresas como para las pequeñas empresas formales e informales. Las particularidades de cada una de estos, implica necesariamente que cualquier política de fomento o desarrollo debe ser diseñado de la mano con los actores representados por los gremios empresariales representativos.