Desde comunista, terrorista, pasando por corrupta, mafiosa, los peruanos hemos sido testigos de lo peor de las campañas políticas de las últimas décadas. Un nivel bajo para electores del mismo nivel.

¿Hacia dónde se están dirigiendo los mensajes de Perú Libre y Fuerza Popular? Pues, al parecer, a lo peor del peruano. Hay una guerra sucia que resalta más que las propuestas porque estas no calan en la población.

Entonces, nos hemos llenado de insultos, de enemigos gratuitos, de gente repleta de rencor pidiendo unidad, que exige paz tirando piedras y otros vociferando cambios con recetas del pasado que nunca han funcionado.

Nos habíamos odiado tanto y no lo sabíamos. Ocultamos pasiones cargadas de diatribas contra quien piensa diferente. Pero, parece que los políticos sacan lo peor del elector. Ellos son expertos en la materia.

El problema es lo que pasará luego del 6 de junio. ¿Cómo miras a quién te ha dicho terruco? ¿Qué le propones a quien calificas de mafiosa? ¿Después de las elecciones será borrón y cuenta nueva? Estamos creando una tempestad.

¿Qué más te puedo decir? Que el Perú no se merecía tanta basura para convencerse de su pobreza, que el rencor interno siempre ha vivido en cada calle polvorienta del asentamiento humano como en la zona VIP limeña.

A menos de una semana para ir a las urnas solo espero que podamos controlar nuestra frustración en caso de perder.