Con bastante demora, el Ministerio Público ha abierto investigación preparatoria contra el terrorista Víctor Polay Campos, cabecilla de la banda armada MRTA, y otros seis indeseables por el delito de homicidio calificado en agravio de personas de la comunidad LGTBI cometido en mayo de 1989 en el bar “Las Gardenias”, en Tarapoto.
Esta vil acción consistió en asesinar a homosexuales, lesbianas y trans que estaban en dicho centro de diversión. El MRTA cometió este crimen grupal en lo que llamado “limpieza social”, pues en su “lógica” retorcida consideraban a estas personas como elementos nocivos para los ciudadanos.
Se trata quizá del más grande asesinato contra personas de la comunidad LGTBI que se haya cometido en el Perú.
Irónico que hasta la actualidad haya gente de izquierda que considere al MRTA como un grupo “revolucionario” y que incluso haya abogado ante foros internacionales para que sea retirado de la lista de bandas terroristas a nivel mundial.
Ahora el terrorista Polay tendrá que responder por este acto salvaje cometido por su banda. Sin duda, si recibe la sanción que se merece, nunca más verá la luz de la libertad que no merece. Ojalá.